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El presidente Evo Morales puso en marcha este jueves la planta petroquímica de Urea y Amoniaco, ubicada en Bulo Bulo (Trópico de Cochabamba) y cuya construcción implicó una inversión de 950 millones de dólares. En el acto, el ministro de Hidrocarburos expresó su deseo de que el Primer Mandatario siga en funciones hasta el 2035.
“Desde los movimientos sociales nos hemos propuesto cambiar Bolivia y este inicio de operación de la planta de Urea es el resultado de las grandes luchas del pueblo boliviano”, destacó Morales.
Cuando el Presidente terminó su discurso, sonaron las sirenas y se dieron por inauguradas las operaciones del complejo, que según el Gobierno da inicio a una era industrial.
“El país se industrializa y crece, y Evo permanece me imagino hasta el 2035”, expresó el ministro Sánchez durante su discurso, tras lo cual pidió al presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Oscar Barriga que entregue la primera bolsa de Urea al jefe de Estado.
El acto tuvo una duración de más de tres horas, además de una amplía lista de oradores y la presentación de grupos de baile y la actuación de los Kjarkas. Además estuvo como invitado especial el vicepresidente del Perú, Martín Vizcarra.
El complejo petroquímico contempla una planta de amoníaco y urea destinada a producir fertilizantes nitrogenados y agroquímicos con una capacidad de producción de 600.000 toneladas métricas de urea al año.
Aunque el contrato de construcción de la obra fue firmado en septiembre de 2012, la obra se inició el 2013 y estuvo a cargo de la empresa surcoreana Samsung.
Inauguramos la Planta de Urea y Amoniaco en Bulo Bulo. Es un hecho histórico, Bolivia realiza la inversión más grande de su historia. pic.twitter.com/5M1cVD3ixI
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) 14 de septiembre de 2017
Detalles
El ministro Sánchez informó que en realidad la instalación comprende tres plantas: una de urea, otras de amoniaco y la tercera de servicios auxiliares, que se despliegan en una extensión de cinco kilómetros de largo por uno de ancho.
Indicó que entre el 10% y 20% de la producción será para el mercado nacional, mientras que el resto irá para la exportación. Señaló que entre los destinos potenciales- del fertilizante son los estados brasileños de Mato Grosso y Mato Grosso do Sul, además de Perú, Argentina y Paraguay.
Sánchez destacó que la ubicación es una ventaja para la instalación, puesto que el fertilizante puede llegar en un día a Brasil, que ahora compra el producto de China y Rusia con un envío de dos meses.
Explicó que en la construcción de la planta se crearon 3.500 empleos directos y 7.000 indirectos, mientras que en la fase operativa habrá 250 empleos directos y 800 indirectos.
Aclaró que este jueves arrancan las operaciones de la planta, pero recién en 14 días se producirá el primer grano de urea.
Fotos: Radio Pío XII
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