MEDIO AMBIENTE
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Planta de Sak’a Churu recibe residuos de las islas verdes

Una isla verde con contenedores diferenciados y que se encuentra en Plaza San Francisco. (Foto archivo ANA)



Vía: Agencia de Noticias Ambientales (ANA)

Vidrio, papel, cartón, plásticos, metales y otros, salvo residuos orgánicos son procesados en esas instalaciones para vender la materia obtenida a las industrias.

La Paz, octubre de 2022 (ANA).- En visita realizada el fin de semana a las plantas de tratamiento de residuos fue posible evidenciar que la planta de Sak’a Churu, que queda más allá del final de la avenida Buenos Aires, en dirección a Achocalla, específicamente en un espacio característico de los valles secos de La Paz, recibe los residuos que provienen de las islas verdes y de los contenedores diferenciados para proceder a su reciclado, con la única excepción de los residuos de procedencia orgánica.

Se trata de los contenedores azules, verdes y amarillos. En el municipio de La Paz hay al menos 52 espacios denominados islas verdes, mismos que fueron inaugurados en julio de este 2022, en estos espacios se recolectan de modo diferenciado todo tipo de residuos sólidos en general, es decir plásticos, papel, cartón, metales y vidrio, siempre en apoyo de la cultura de la “Economía circular” que consiste en reciclar, reutilizar y reparar materiales todas las veces necesarias.




Una isla verde con contenedores diferenciados y que se encuentra en Plaza San Francisco. (Foto archivo ANA)

La planta de Sak’a Churu ya funciona desde hace alrededor de cinco años y mediante el reciclaje y la maquinaria con la que trabaja para el fin está en condiciones de ofrecer materia prima para las diferentes industrias. Ahora está siendo fortalecida con una planta de triturado para tratar papeles, habiendo otra que realiza el lavado de las bolsas de yogurt provenientes del desayuno escolar.

Plastimadera




Existen mercados para la materia que se produce con los residuos. (Foto ANA)

Se cuenta con mercados para todo ello, indicaron los responsables, añadiendo que actualmente se está procediendo a la venta de vidrio, al efecto existe solo una empresa en el mercado y que se encuentra en Chuquisaca, describió Marco Martínez de la Dirección de Prevención y Control Ambiental del Gobierno Autónomo Municipal de La Paz (GAMLP).

“Ya con lo que saquemos de las empresas vamos a ver lo que haremos como fuente de energía, no es gas ni energía eléctrica, sino con una fuente con leña y como estamos produciendo ya con las bolsitas de lavado y picado lo vamos a ofrecer a EMA Verde del GAMLP para que estén con la producción de lo que es plastimadera, con lo cual ya la planta ya está cumpliendo un ciclo con todo lo que es materia prima”, especificó.




Maquinaria especializada procede a la limpieza, molido y separación de los residuos para darles uso nuevamente. (Foto ANA)

Cabe recordar que la plastimadera o madera plástica es un sustituto ecológico para la madera natural, se trata de un material único, innovador, vanguardista, tecnológicamente funcional, estéticamente muy parecido a la madera pero con notables ventajas como su duración, rentabilidad, color integrado, no absorbe contaminantes, hongos, ni insectos.




Se muele el vidrio tanto de color ámbar, blanco o verde, es decir se torna nuevamente en materia prima para diferentes usos. (Foto ANA)

A la planta ya llegan los residuos separados de origen. Se aclaró que quienes se dedican al reciclaje y ya cuentan con acreditación del municipio para realizar esa actividad, ya cuentan con sus propios compradores y todo lo necesario.

“Una vez que llega aquí, entonces lo seleccionamos, en las islas verdes siempre vienen mezclados con colores, con otro tipo de sustancias, materiales los separamos de acuerdo a lo que nos pida el mercado tenemos lo que son botellas pet por colores transparentes, verdes; tenemos lo que es el vidrio que quieren ámbar, quieren blanco, quieren verde; el cartón ya nos piden normal excepto algunos que no entran en esto”, se especificó. (VLM)




En la planta de reciclaje de Sak’a Churu se cuenta con al menos cinco técnicos, además de uno ambiental. (Foto ANA)