MEDIO AMBIENTE
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Viceministerio de Autonomías evita brindar información sobre jurisdicción en el Valle de las Ánimas

Pese a la vigencia del acuerdo de Escazú que establece el libre acceso a la información ambiental, algunas instituciones prosiguen poniendo trabas burocráticas negándose en los hechos a acatar el convenio. (Foto jesuitas.lat)



Vía: Agencia de Noticias Ambientales (ANA)

La falta de delimitación alienta el avasallamiento de esta área natural única donde personas inescrupulosas levantan construcciones, en tanto que maquinaria pesada habilita lotes y abre sendas para vehículos depredando el lugar cuya vegetación y fauna son características de los valles secos interandinos.

Texto: Vladimir Ledezma Maldonado

La Paz, febrero de 2022 (ANA).- La dirección General de Organización Territorial comprendida por el viceministerio de Autonomías y que a su vez es parte constituyente del ministerio de la Presidencia, evita sistemáticamente el brindar información relativa a la jurisdicción sobre el Valle de Las Ánimas.

El Valle de las Ánimas, área protegida municipal de carácter patrimonial, aunque sin gestión que se encuentra al sureste de la ciudad de La Paz, carece de delimitación precisa en cuanto a que no se establece aún si es que se sitúa en el área jurisdiccional del municipio de La Paz o en el de Palca, lo cual debe ser definido por el viceministerio de Autonomías, de acuerdo a la resolución 1059 emitida por la gobernación paceña, sin embargo, desde 2016 aún no existe respuesta de ninguna naturaleza.

Al respecto, después de esperar una respuesta a nuestro apremio investigativo en las puertas de la Casa Grande del Pueblo, Martín Lamas, que sería el nombre del titular de límites de esa repartición gubernamental, instruyó a sus subalternos que ante los requerimientos de la prensa para obtener información sobre la referida situación limítrofe, se debe previamente presentar una carta solicitando esos datos.

Acuerdo de Escazú




Pese a la vigencia del acuerdo de Escazú que establece el libre acceso a la información ambiental, algunas instituciones prosiguen poniendo trabas burocráticas negándose en los hechos a acatar el convenio. (Foto jesuitas.lat)

Al respecto, el acuerdo de Escazú, suscrito y ratificado por Bolivia, así denominado por haberse efectuado en la ciudad costarricense de Escazú en 2018 y del que nuestro país forma parte, habiendo ratificado ello mediante ley No. 1182, garantiza el libre acceso por parte de los medios de comunicación, los periodistas y la ciudadanía en general a todo tipo de información relacionada con la temática ambiental así como al de vivir en un medioambiente sano.

El recordar esto tiene como objetivo demostrar que ahora, con la entrada en vigencia del acuerdo de Escazú, ninguna autoridad, ni del gobierno central, ni de gobiernos departamentales ni municipales puede actuar legalmente si impide el acceso a la información, justicia y participación ambiental a la prensa y ciudadanía en general, como juntas vecinales, las ONG u organizaciones ambientalistas, entre otras (v. “Acceso a la información ambiental vigente desde este Día Internacional de la Tierra”, ANA, 22 de abril de 2021).

“El denegar al solicitante el acceso a la información ambiental, como acuerdos, contratos u otros relacionados al ámbito, ya sea mediante trabas burocráticas u otros mecanismos, habrá de constituirse de hoy en adelante en violación flagrante al acuerdo de Escazú del que nuestro país es signatario, en ese sentido las autoridades están en la obligación de facilitar el pronto acceso a todas esas informaciones” (Ibíd.).

Formaciones únicas en peligro




El Valle de las Ánimas es un espacio natural único por sus formaciones majestuosas que datan de la era Terciaria. (Foto ANA)

Cabe recordar que el Valle de las Ánimas se caracteriza por sus formaciones únicas constituidas por pedruscos y arcilla, semejantes a enormes obeliscos que recuerdan a gigantes que de pronto se convirtieron en barro seco, todo ello originado por el derretimiento de glaciares existentes durante el final de la etapa terciaria del planeta.

Sus sectores elevados superan los 4300 metros de altura, se halla surcado de amplias cuencas y su superficie se extiende por 2538 hectáreas; sin embargo la falta de delimitación alienta el avasallamiento de esta área natural única donde personas inescrupulosas levantan construcciones, en tanto que maquinaria pesada procede a aplanar suelos y abrir sendas para vehículos depredando el lugar cuya vegetación y fauna son características de los valles secos interandinos. (VLM)




Pese a ser declarado como un área protegida patrimonial, avasalladores y personas inescrupulosas colocan trancas en las mismas cuencas. (Foto ANA)