Autoridades en Chile informaron sobre la desarticulación de una banda internacional de nueve personas que se dedicaba al tráfico de migrantes bolivianos para que ingresen, de forma ilegal y por pasos no autorizados, a ese país.

Desde febrero, se estima que al menos unas 3.600 connacionales fueron captadas en territorio boliviano y a las que se les ofrecía ingresar a territorio chileno. Por día, se calcula que ingresaban entre 40 a 60, incluso en algunos casos hasta 90.

El destino final era la comuna de Estación Central, ubicado en la ciudad de Santiago.

Entre los detenidos se encuentran seis chilenos, dos venezolanos y una boliviana. Todos fueron detenidos en Alto Hospicio, Iquique, Antofagasta, Coquimbo y Santiago.

A cada una de las personas que transportaron se le cobraba $us 200, informó el jefe nacional Antinarcóticos y Crimen Organizado de la PDI, prefecto inspector Alex Schwarzenberg, según publica el diario Emol.

La fiscal Carolina Suazo informó que de las 3.600 que ingresaron de manera irregular se encontraban varios menores de edad.

Ellos habrían ingresado a pie a Chile en altas horas de la noche y luego permanecieron en muchos casos hacinados en las casas en las regiones fronterizas de Colchane y Pozo Almonte. Desde esos lugares continuaron el viaje hasta Santiago.