Las instituciones vivas del Beni mantienen estado de emergencia departamental en defensa de la construcción del puente binacional Guayaramerín-Guajara-Mirim sobre el río Mamoré. El Gobernador del Beni, Alejandro Unzueta llamó a los benianos a mantenerse unidos en torno al rechazo del informe técnico del Ministerio de Obras Públicas que pondría en riesgo la construcción de la obra.

El pasado viernes una reunión interinstitucional convocada por el Gobernador dio un plazo de 72 horas que comenzaría a correr a partir de este lunes para que la Cancillería revierta el informe y acepte la construcción, bajo amenaza de un paro indefinido con bloqueo de aeropuertos, carreteras, vías pluviales y cierre de fronteras a partir de esta semana.

Brasil retomó la construcción del puente para cumplir la deuda histórica que proviene del Tratado que Petrópolis del año 1.903. El diseño original consta de un puente de 1.200 metros a un costo de más de 70 millones de dólares que serán cubiertos en su totalidad por Brasil.

Sin embargo, el Viceministerio de Transportes pidió que el diseño sea revisado para que el puente tenga una altura de 19 metros en lugar de los 16 metros que prevé el proyecto original.

La reunión selló la unidad institucional y rechazó ese criterio porque el nuevo diseño significaría volver a fojas cero y echaría por tierra el proyecto tan esperado para conectarse al desarrollo del Estado de Rondonia en el lado brasileño.

“La posición es clara, defenderemos a nuestro departamento. El puente no es solo un proyecto, es un catalizador del progreso, prosperidad y la unidad de nuestra región. Es nuestro deber demostrar el poder de convocatoria y la voluntad colectiva de un pueblo decidido, porque el puente será una oportunidad histórica para el desarrollo y la prosperidad que no debemos dejar pasar”, dijo”, el Gobernador beniano en un pronunciamiento público.

Entre tanto, el ministro de Obras Públicas Edgar Montaño ya anticipó que en septiembre se realizará una reunión técnica con Brasil para definir la altura y longitud propuesta por Bolivia a fin de que las nuevas dimensiones permitan a futuro garantizar la navegación bajo el puente de un convoy conformado por barcazas y remolcadores bajo los estándares internacionales. 

Ratificó que la posición del gobierno boliviano es que el puente se eleve a 19 metros de altura y a 160 metros entre gálibos. “Las previsiones que estamos tomando es para que sea navegable y no dificulte el tránsito de las embarcaciones”, dijo la autoridad.