El gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, anunció que no asistirá al encuentro nacional por el Censo Nacional de Población y Vivienda y calificó a ese escenario como una reunión de “masistas” al que no lo avalará.

En una concentración en la Villa Primero de Mayo, la autoridad departamental cuestionó al Gobierno y aseguró que “no le importa” el paro indefinido y el “sacrificio” de las personas que cumplen la medida de presión.

“Yo no entiendo, aquí es el conflicto, en el departamento de Santa Cruz es el problema, pero se mandan a cambiar a una reunión entre masistas y para los masistas, esa es la verdad, solamente es una reunión política donde una vez más van a sacar una fecha distinta al cabildo”, sostuvo.

En su criterio, en el encuentro del viernes solamente se “impondrá” que el Censo se realice en 2024, restando importancia a las determinaciones del cabildo cruceño del 30 de septiembre que exigió que la encuesta nacional se realice en 2023.

“Yo no soy del criterio que debamos ir a la ciudad de Cochabamba bajo ningún motivo, porque eso es irrespetar a nuestro pueblo. Siempre lo dijimos, estamos abiertos a cualquier diálogo, pero no vamos a ir a avalar con nuestra presencia a una reunión de masistas que lo único que quieren es sacar una fecha para el 2024”, dijo.

Cuestionó que no se haya invitado al presidente del Comité Cívico pro Santa Cruz, Rómulo Calvo y aseguró que el Gobierno haya convocado a “sus alcaldes a sus gobernadores y a sus movimientos sociales para sacar una fecha distinta”.

La convocatoria de este viernes esta dirigida a los nueve gobernadores, alcaldes de todo el país, rectores de universidades públicas, entre otros. Se prevé que en ese escenario se busquen consensos para definir la fecha definitiva del Censo.

Pero Camacho consideró que asistir a Cochabamba sería respaldar una reunión de "masistas”. “No vamos a darle el aval en esa reunión. Si ellos (el Gobierno) quieren solucionar (el conflicto), por respeto a nuestro pueblo, que vengan a Santa Cruz como debe ser”, insistió.

En medio a los bloqueos y cercos en varios accesos a Santa Cruz, el gobernador dijo que Santa Cruz da de comer al 75% del país.

“En cada plato de comida de cada boliviano está el esfuerzo el trabajo y la solidaridad de nuestro pueblo. No vamos a permitir que nos basureen y tienen que venir acá para hacer la reunión donde el pueblo se está sacrificando”, remarcó.