Los tres dirigentes afines al MAS, que fueron aprehendidos el martes en Cochabamba, fueron trasladados a la ciudad de La Paz, donde se llevaría adelante su proceso judicial, sin embargo, la defensa de los detenidos rechazó que la causa penal se desarrolle en la sede de Gobierno y anunció que recurrirá esa determinación.

Los dirigentes Remy Cañiz, Osvaldo Gareca y Lucy Sara Escobar, candidata del MAS a senadora, fueron aprehendidos la mañana del martes en Cochabamba, con cargos de terrorismo tras ser vinculados a sucesos ocurridos en K’ara K’ara desde mayo.

Su abogada en La Paz, Mónica Irusta, indicó que la Fiscalía había trasladado a los aprehendidos a la sede de Gobierno bajo el argumento de que existe un Decreto para aquello.

Un Decreto del periodo de Evo Morales permite que los casos que involucran a la seguridad del Estado, como del delito de terrorismo, se desarrollen en La Paz.

La abogada Irusta, sin embargo, dijo que un Decreto no puede estar encima de la Constitución y las leyes, por lo cual se estaría vulnerando el derecho al debido proceso de sus defendidos.

Agregó que la justicia de La Paz no es competente en este caso, porque el caso está registrado en Cochabamba y, además, ya existe una persona con detención preventiva por este proceso en ese departamento.

Anunció que presentará un incidente de incompetencia, para que la justicia en La Paz no asuma el caso y que el proceso se desarrolle en Cochabamba.

La abogada precisó que sus defendidos están acusados de terrorismo, atentados contra la salud pública, instigación a delinquir y asociación delictuosa, pero reclamó que hasta media mañana la Fiscalía no presentó la imputación, incumpliendo el plazo de 24 horas que tiene para hacerlo después de la aprehensión.