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Cerca a las 10:30 de este sábado, una de las torres de iluminación del estadio Real Santa Cruz se vino abajo aplastando a dos personas, una persona adulta y un menor de tres años. El niño fue evacuado de emergencia a una clínica, mientras que la mujer permaneció casi sepultada por las columnas de concreto.
El menor fue trasladado hasta la clínica Santa María, desde donde confirmaron a EL DEBER que el menor llegó al sanatorio sin signos vitales.
"El menor falleció a consecuencia de un trauma por aplastamiento de órganos internos, tuvo una hemorragia interna", aseguró Erlin Gutiérrez, Jefe de Emergencias de la clínica.
Tras la emergencia, al lugar llegaron brigadas de paramédicos, policías y rescatistas para brindar la ayuda necesaria. Las víctimas fueron evacuadas y trasladadas a centros médicos cercanos.
La torre de iluminación cayó sobre las graderías, una mujer quedó casi sepultada por la columna de concreto. Los paramédicos redoblan los esfuerzos por rescatarla, ante la dificultad se tuvo que recurrir a una máquina excavadora para retirar la pesada columna y liberar a la víctima.
La mujer que permanecía aplastada por la columna de concreto logró ser rescatada pasado el mediodía, gracias a la colaboración de muchas personas y la intervención de una máquina excavadora. La mujer fue trasladada al hospital Japonés.
(Diez)
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