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El estudio denominado “Los alimentos transgénicos: Una Realidad en Bolivia”, realizado por el laboratorio de Genética Molecular del Instituto Seladis de la Facultad de Ciencias Farmacéuticas y Bioquímicas de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), identificó al menos dos tipos de harinas nacionales que fueron elaborados con granos transgénicos.
De 14 tipos de muestras de productos elaborados en base a granos como: harina de trigo, chaque de trigo, trigo molido, maicena y polenta instantánea, se pudo identificar que cuatro productos son transgénicos. Dos de ellos son de procedencia extranjera: polenta instantánea de Argentina y maizena de Brasil. Otros dos son de procedencia nacional: harina de soya y harina de maíz.
En Bolivia el único producto transgénico autorizado es la soya. En 2005, el gobierno del entonces presidente Carlos Mesa aprobó la producción y comercialización de soya transgénica resistente al herbicida glifosato. Sin embargo aquello no ocurre con el maíz.
Es por eso que surge la interrogante de qué está pasando con los granos en el país. Las hipótesis que se desprenden del estudio son: “o que se están introduciendo granos de otros países para elaborar productos procesados o que se están cultivando granos transgénicos (maíz, trigo, otros) en territorio boliviano a partir de los cuales se están fabricando productos elaborados de consumo libre”.
Estos granos llevan las secuencias 35S y NOS propias de un alimento transgénico. Lo llamativo es que estos productos no tienen el etiquetado dones especifica que se trata de un producto transgénico. Estos resultados que fueron comprobados científicamente deben llamar a la reflexión a las autoridades gubernamentales que tienen la obligación de regular este tipo de acciones.
El estudio fue dirigido de manera muy particular a harinas nacionales y provenientes de países fronterizos, debido a que a partir de las mismas se elabora el pan casero que consume cada día la población.
Pero no se puede decir lo mismo de los resultados de cultivos de granos en La Paz, pues ninguno salió positivo, lo que significa que no hay cultivos transgénicos.
“Los resultados permiten reportar que en la actualidad no se estarían cultivando granos modificados genéticamente en territorios del departamento de La Paz, refiriéndonos principalmente a las zonas cálidas del mismo donde se ha realizado la colecta de muestras (al norte y oeste del departamento)”, dice el resultado.
Se tomó varias muestras de maíz amarillo, blanco, naranja, café, colorado, wilkaparu, gris y morado, todos salieron negativos. Lo propio ocurrió con el trigo café y amarillo. Al igual que el frijol carioca, negó, mairana.
El laboratorio de Genética Molecular del Instituto Seladis de la Facultad de Ciencias Farmacéuticas y Bioquímicas de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) realizó durante las gestiones 2014-2015 el análisis fenotípico y genético de granos (maíz, trigo, frijol) recolectado de diferentes regiones.
El trabajo fue realizado en el marco del Proyecto “Detección y cuantificación de organismos genéticamente modificados por reacción en cadena de la polimerasa en tiempo real en granos de producción del departamento de La Paz” financiado por el fondo de la cooperación Sueca “ASDI”.
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