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Sorpresa a nivel mundial. Contra todas las previsiones y en un final apretado, el polémico empresario Donald Trump, del partido Republicano, fue elegido como el cuadragésimo quinto presidente de los Estados Unidos.
La mayoría de las encuestas daban por victoriosa a Hillary Clinton, pero a medida de que el conteo de votos se realizaba la tendencia se fue marcando a favor de multimillonario.
Como no había pasado en anteriores elecciones, los grandes medios estadounidenses tomaron con cautela los datos y tuvieron que esperar hasta la madrugada de este miércoles para confirmar las cifras finales que sacudieron al mundo.
Minutos antes de las 04.00 las cadenas Fox News y CNN recién se animaron a declarar a Trump ganador. Casi en paralelo, el republicano dio un discurso de victoria en tono conciliador y reveló que Clinton le llamó para reconocer su derrota.
Como se preveía, la candidata del partido Demócrata se alzó con la victoria en los pujantes estados de las costas, como California y Nueva York, mientras que Trump ganó en los estados más conservadoras del centro de EEUU.
La diferencia a favor del empresario se marcó en los estados “clave”. Trump sorprendió con victorias en Florida –que en 2000 fue importante en la victoria de George W. Busch- y en Ohio, que según los expertos marca la diferencia para la elección del presidente.
Trump se hizo conocido como empresario inmobiliario, que supo promover su apellido como marca. Grandes hoteles, casinos y lujosos edificios ayudaron a formar la fama del “Donald”.
La televisión tampoco es un escenario desconocido para el nuevo presidente estadounidense. Por varios años protagonizó el reality show The Apprentice y patrocinó el concurso de Miss Universo.
En su trayectoria mediática no fue ajeno a los escándalos y las confrontaciones. Como político siguió en la misma dinámica.
Su campaña comenzó con una fuerte polémica porque propuso construir un muro en la frontera para evitar el ingreso de mexicanos ilegales a su país. Sus planteamientos y sus exabruptos, sobre todo mediante Twitter, marcaron la campaña de quien ahora será uno de los hombres más poderosos del mundo.
Para ser presidente, Trump tuvo que superar la imagen negativa de algunas de sus declaraciones y hasta incluso la difusión de un video de 2005 en el cual se lo escucha jactándose sobre cómo su fama le permite “manosear” a mujeres.
Trump basó su empuje en el discurso de que no es un político como los tradicionales de Washington, sino es un empresario que sabe hacer negocios y sustenta su propia campaña, aunque también recibía donaciones.
Ahora el mundo de alista. El nuevo presidente anunció antes de ser electo que tendrá una línea más dura que su antecesor, Barack Obama, en las relaciones internacionales. Por ejemplo, ya expresó su rechazo a los refugiados sirios y dijo que entre ellos puede haber terroristas. Asimismo, manifestó que también seguiría mandando presos a Guantánamo.
EEUU también se debe alistar. Si bien Trump anunció que rebajará los impuestos y hará que las industrias vuelvan a su país, también dijo que eliminará el plan de salud conocido como “Obamacare”, mediante el cual se otorga se generan las condiciones para que los menos pudientes accedan a atención sanitaria.
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