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El desalojo de un edificio ocupado por unas 200 familias en São Paulo derivó en enfrentamientos entre policías y personas sin techo, con bombas de gas y pedreas en pleno centro de la ciudad, un autobús incendiado, heridos y al menos 70 detenidos.
Los incidentes comenzaron en la mañana del martes, cuando la policía llegó al antiguo hotel abandonado para desalojarlo por orden judicial y encontró resistencia de los ocupantes, que lanzaron muebles y objetos a los uniformados.
Los uniformados usaron bombas de gas y balas de goma para alejar a los ocupantes, pero el caos se extendió por a varias calles céntricas. Manifestantes que según la policía se unieron a los desalojados incendiaron un autobús frente al Teatro Municipal e intentaron romper las persianas de comercios cerrados.
Hubo quejas de un uso excesivo de la fuerza por parte de los policías. El comandante Glauco Silva de Carvalho, responsable del operativo, negó las acusaciones y sostuvo que dos efectivos policiales resultaron heridos en los enfrentamientos.
La falta de viviendas ha sido uno de los problemas que en los últimos tiempos generó más protestas en São Paulo, con grupos que reivindican la ocupación de edificios abandonados como respuesta a esa carencia. (BBC)
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