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“No hay en Venezuela un régimen de facto, no hay un golpe de Estado, no hay el uso de la fuerza armada”. Así el viceministro de Coordinación con Movimientos Sociales, Alfredo Rada, describió la actual situación política en el país gobernado por Nicolás Maduro, luego de la decisión del poder judicial de dejar sin atribuciones al legislativo.
La determinación del tribunal supremo venezolano fue calificada como un “golpe” por parte de la oposición venezolana, sin embargo, para Rada se trata de una medida plenamente constitucional.
El viceministro aseveró que hay sectores que están mintiendo respecto a la situación de Venezuela, con la intención de generar una intervención extranjera. Aseguró que socialistas y antiimperialistas defenderán el proceso venezolano.
Sostuvo que quienes ahora critican a Maduro son los mismos que antes no dijeron nada cuando hubo golpes de Estado en otros países, como el que sufrió Manuel Zelaya en Honduras, Fernando Lugo en Paraguay y Dilma Rousseff en Brasil.
Oposición pide retirar embajador
Entretanto, legisladores de Unidad Demócrata (UD) y el Partido Demócrata Cristiano (PDC) solicitaron, mediante una nota al presidente en ejercicio Álvaro García Linera, que Bolivia retire a su embajador en Venezuela.
El jefe de bancad de UD, Wilson Santamaría, recordó que de acuerdo a la Constitución el Estado boliviano es democrático y pacifista, por lo cual no puede ser cómplice con la decisión del tribunal supremo venezolano.
Para el opositor, que se haya retirado los poderes e inmunidad a los parlamentarios de Venezuela abre el camino a que los mismos sean sometidos a procesos judiciales y encarcelados.
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