Regional
En el área rural del norte de Potosí
Alumnos se van a Argentina y Chile en busca de trabajo
Argentina es un destino escogido. Foto/Tomada de Internet

Lunes, 6 Noviembre, 2017 - 08:10

Juan Carlos Enríquez

RADIO PIO XII

¿Ya se han ido? Preguntaba un profesor del área rural del norte potosí, este pasado domingo 5 de noviembre. Otro respondía “tenía 20 alumnos pero ahora tengo 14”. “Han recogido su Juancito Pinto, ya les alcanza la nota y se han ido” reiteraba el primero.

Es la migración de jóvenes quienes suelen ir a Yungas a la cosecha de coca, a la Argentina y a Chile a la cosecha de ajo, tomate u otros productos.

Aureliano Portugal, corregidor de irupata, municipio de Chayanta señaló que la falta de agua y los bajos ingresos obligaron a 12 familias a trasladarse a centros mineros del departamento donde van a lograr más ingresos económicos. Los precios de los minerales se recuperan y el Banco Mundial anuncia que las cotizaciones del zinc, plomo y plata mejorarán el 2018 pero bajará el oro.

En pasados meses, las defensorías de la niñez de esta región recibieron varias solicitudes de traslado de jóvenes hacia el departamento de La Paz. Los policías de turno que en ese tiempo atendían el control en la terminal de buses de Llallagua indicaron que algunos pasajeros jóvenes iban a la cosecha de coca en los Yungas, ayudando a un tío o a un conocido.

“Para pagar la deuda pues”, indicaron dos familias de esta región que se asentaron en la ciudad de Cochabamba y se fueron a la Argentina a la cosecha de alimentos.

El plan de desarrollo municipal de los años 2009-2014 de Llallagua señaló que la población migrante flotante fue de 15%, quienes se trasladaban a diferentes lugares del país, pero principalmente a Cochabamba y a Chile.

Potosí perdió unos 300 mil habitantes entre los años 1991 a 2001 y 131 mil entre los años 2001 a 2012 según los censos de esas gestiones.

Sin embargo el comercio y el transporte que absorbían como esponja la fuerza de trabajo que no encuentra laburo ha colapsado y ya no puede más con las personas, principalmente jóvenes que buscan mejorar sus vida e ingresos urgentes y necesarios.

Según el mismo censo del año 2012, más del 60% de la población en edad de trabajar es cuentapropista, es decir trabaja en negocio propio, en alguna cooperativa o un taller familiar. Ese  más de 60% tampoco tiene seguro médico, seguro de jubilación, aguinaldo o vacación.

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