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El administrador del club nocturno Katanas, Gustavo Fernández, fue enviado a la cárcel de Patacamaya con detención preventiva, por la presunta de los delitos de trata de personas y organización criminal, denunciados por la hija del propietario, Noemí Cámara, informó el Ministerio Público.
Según la denunciante, Fernández viajaba a varios países vecinos para buscar mujeres jóvenes dispuestas a trabajar en el club nocturno, de las cuales enviaba fotos de sus documentos al propietario del club nocturno, Marco Cámara, para que viabilice la migración a Bolivia.
Una vez en el país, las mujeres eran despojadas de sus documentos y obligadas a tener relaciones sexuales bajo amenaza de deportación, para pagar el costo de los pasajes aéreos.
Asimismo, la denunciante refirió que las mujeres eran llevadas durante el día a la casa de Cámara en la zona Llojeta, y en la noche eran trasladadas al local Katanas, donde presuntamente eran explotadas sexualmente.
Según las investigaciones, en el allanamiento realizado al Katanas se secuestró informes que evidencian los altos ingresos económicos y también la documentación de mujeres extranjeras, entre otros indicios.
En ese marco, se estableció que ambos delitos eran la forma de subsistencia y enriquecimiento de sus miembros, mediante la trata y explotación sexual de terceras personas, por lo que el Ministerio Público solicitó la aplicación de la medida extrema.
El propietario del Katanas, Marco Cámara, aún no sometido a medidas cautelares, puesto que ayer tuvo que ser hostilizado por problemas de salud.
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