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Ahora es el turno de los internos del penal de Uncía, que al igual que en Tarija y Cochabamba, también se declararon en estado de emergencia en demanda del pago de prediarios que no reciben desde hace tres meses, reportó la radio Pio XII de la Red ERBOL.
“Los internos de la cárcel de Uncía amenazan con huelga de hambre e incluso quieren crucificarse y coserse los labios en caso de que hasta el 20 de este mes no les cancelan sus prediarios y otros compromisos incumplidos”, reportó la emisora local.
Los privados de libertad en Uncía se reunieron el fin de semana y decidieron apoyar las medidas de presión asumidas en otros centros penitenciarios del país.
En un pronunciamiento público, los reos de Uncía también expresaron su queja porque no se habría arreglado la mala instalación de servicios básicos. Observaron la mala atención de salud y retardación de justicia.
La cárcel de “San Miguel” de Uncía está ubicada en el municipio del mismo nombre y es la más grande del norte potosino.
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