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El viceministro de Comercio Interno y Exportaciones, Óscar Sandy, negó que haya incurrido en enriquecimiento ilícito y aseguró que sus transacciones financieras están sustentadas en sus ingresos de su familia, a los cuales pidió somete a una auditoría.
“Lo que vamos a hacer primero es demostrar objetivamente de manera documentada, voy a pedir que se haga una auditoría financiera de los inmuebles de mi familia y mis egresos”, dijo en entrevista con ERBOL.
Sandy fue imputado por el delito de enriquecimiento ilícito, puesto que, del análisis realizado por la fiscal Rosario Venegas, se concluyó que sus movimientos financieros y adquisiciones de bienes no se justifican con sus ingresos.
El Viceministro dijo que recibió depósitos anónimos en su cuenta bancaria por concepto de viáticos y que, para costear sus bienes, usó el dinero de la devolución de un anticrético que tenía en Sucre, además de recursos acumulados por él y su esposa.
Argumentó que el informe de la Unidad de Investigaciones Financieras (UIF), en que se basa la imputación, no tomó en cuenta sus ingresos de antes de 2008, por lo cual anunció que de nuevo entregará sus descargos a la fiscal Venegas.
Para Sandy, que lo hayan imputado significa que la fiscal pretende hacer una investigación más minuciosa. “No hay ningún problema, este señor (en referencia a él) se somete a cualquier investigación, no tengo nada de que tenerle miedo porque siempre he manejado mis cosas de manera transparente y de manera honesta”, aseguró.
Aseveró que su denunciante, el exdirigente panificador Dandy Mallea, le tiene jurada una venganza, porque fue sentenciado y encarcelado por un proceso impulsado por él.
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