Social
¿De qué vamos a vivir estos días? pregunta María Domínguez
Ambulantes dicen que les prohibieron vender en las calles durante el G77
Los dos primeros anillos de Santa Cruz son el área restringida.


Martes, 10 Junio, 2014 - 21:37

“Estos días con motivo de la Cumbre (del G-77+China, los gendarmes de la Alcaldía Municipal) nos están prohibiendo la venta de periódicos. Aquí mi vecina que vende pipocas y somó será víctima de decomiso de sus productos ¿Entonces qué vamos a comer nosotros? ¿De qué vamos a vivir esos diez días?”, dijo este martes doña María Domínguez, vendedora de periódicos ubicada en la zona del mercado Los Pozos.

La “canillita” expresó su preocupación a radio Alternativa de Erbol, después de que la Alcaldía Municipal de Santa Cruz ordenó el desalojo temporal de las vendedoras y vendedores ambulantes del primer y segundo anillo, para que durante el evento internacional, programado para este sábado y domingo, las calles del centro muestren otra imagen.

Periodistas de este medio observaron que en las cuadras adyacentes a la plaza 24 de Septiembre, lugares próximos a los hoteles, centros culturales y la ruta hacia el aeropuerto Viru Viru –donde arribarán los invitados internacionales– ya  “desaparecieron” los vendedores ambulantes de jugo, los tradicionales carritos de picolé, puestos de hamburguesas y otros.

“Al menos que nos dejen una entradita al mercado para poder ganar nuestro pan del día y para que sigamos comiendo. No nos pueden dejar sin ingresos”, indicó doña María, otra comerciante afectada.

En el caso viejo de la capital cruceña, más conocido como Manzana Uno, ya no se observan a vendedores ambulantes, tampoco los puestos de revistas cerca a la catedral.

El concejal suplente Roger Labarden cuestionó la emisión de la resolución que sanciona el asentamiento de ambulantes en los dos primeros anillos, próximos al área donde se desarrollarán actividades de la cumbre internacional.

“Vinieron para decirme que está prohibido vender en la calle porque vienen los presidentes. (Yo) vendo panqueques paraguayos, cuñapés, salchichas y escabeche ¿Sabe? No se gana mucho, me ingresa como Bs200 no más”, agregó Victoria Eguez.

Aunque a diferencia de las tres primeras comerciantes, una vendedora de horneados del mercado La Ramada, aseguró apoyar esta restricción temporal porque vale la pena hacer un sacrificio por la imagen de la ciudad

“Han prohibido y ante la ley hay que hacer caso, porque lo principal es respeto y si no, no hay nada. Estos tres días voy a ver qué hacer, buscar algo, en fin en otro lado. Son siete años que vendo los horneados y los bizcochuelos”, dijo doña Teresa Flores.

Juanita, otra tradicional picolecera de la urbe, agregó: “Nos dijeron que cuando pase la Cumbre nos van a devolver (nuestros puestos) y mientras tanto no sé de qué vamos a vivir señor periodista”.

Más indignación 

Un representante de la Asociación de Cigarrilleros y Dulces de Santa Cruz ( que pidió no ser identificado para evitar posibles represalias) dijo que estaban indignados por la orden de desalojo de la Alcaldía.

“Están queriendo mostrar a los visitantes de los distintos países que aquí no pasa nada. Yo pienso que algunos gobernantes que vienen no saben, nuestro gobierno está queriendo mostrar lo que en realidad no es Santa Cruz”, aseveró.

Recordó que nadie hizo circular una notificación, pero les dijeron que la orden abarcaría del 1 al 20 de junio.

“El gobierno debería planificar de darnos de comer a nosotros, en vez de dar ese beneficio a los honorables visitantes que están gozando de hoteles, de restaurantes, de todos esos lujos, porque nosotros no tenemos la opción de visitar esos sitios con nuestros negocios”, agregó.

Serviles al Gobierno

El concejal Labarden criticó la rígida posición del oficialismo sobre el tema y recordó que existen “muchas bocas que los pobres deben alimentar”.

“Lastimosamente el Concejo está mal y son unos serviles al Gobierno porque han decretado de que no deben comer los gremiales y ese es un atentado contra las fuentes de trabajo. Es una resolución que saca el Concejo por querer dejar limpia la ciudad. Es como cuando uno se limpia la cara y por dentro está sucia”, aseveró.

Viviendo con las justas

La restricción a la venta ambulante durante la cumbre es un “golpe bajo” a la economía de las familias de escasos recursos, coincidieron todos.

Los que venden en calles, plazas o avenidas, tienen un ingreso mensual entre Bs1.200 y Bs2.500, pagan Bs500 por una habitación alquilada y no gozan de los beneficios del seguro social. Ellos forman parte del creciente comercio informal en las vías de la ciudad de Santa Cruz.

Muchos de ellos son migrantes y se encuentran expuestos a los riesgos que conlleva afrontar las dificultades en una urbe cosmopolita. 

Martha Nina radica hace 15 años en Santa Cruz y es el mismo tiempo que se dedica a la venta de pipocas en el mercado 4 de Noviembre, tercer anillo.

“A 1,50 (bolivianos vendo mi producto) y saco cada día como unos 400. Cuando no hay venta, (gano) entre 300 y 310 bolivianos. Cuando hace frío se vende más y cuando hay calor bajan las ventas”, indicó.

La señora María Vélez, vendedora de periódicos en la zona de Los Pozos, acotó “Le soy sincera, no me alcanza. Yo pago 500 bolivianos por un cuarto y como alquilo dos, debo cancelar 1.000”, afirmó.

La situación no es diferente en la vida cotidiana de don Gumercindo Malala, comercializador de empanadas de pollo y refrescos.

“Tengo empanaditas de pollo y queso, hago sanguchitos. Al día hago entre 240 y 120 bolivianos. Calculo que saco 2.600 bolivianos al mes. Lo que ganamos se va en transporte y taxi, también el gas. Yo pago 200 dólares de alquiler, con mi señora hacemos todo y cuando se puede mi hijo me ayuda”, sostuvo.

La Cumbre del G-77 + China que se cumplirá el fin de semana y que pretender ser una vitrina del desarrollo del país ante los ojos del mundo, se convirtió en un obstáculo para comerciantes ambulantes.