Social
Romero da por consolidado el convenio
Cocaleros de Yungas aceptan acuerdo y se repliegan
Conferencia de prensa de ministros y cocaleros. Foto: ERBOL.


Jueves, 23 Febrero, 2017 - 17:21

Dirigentes de los cocaleros de los Yungas decidieron aceptar el acuerdo que se arribó con el Gobierno sobre la Ley General de la Coca, e informaron que sus bases proceden a desmovilizarse después de seis días de protesta en la ciudad de La Paz.

La tarde de este jueves en el Ministerio de Gobierno, el ejecutivo del Consejo de Federaciones Campesinas de los Yungas (Cofecay), David Huayhua, estuvo en una conferencia de prensa junto a ministros donde anunció que la mayoría de sus bases aceptó en acuerdo.

Entretanto, en la sede de la Asociación Departamental de Productores de Coca (Adepcoca), el dirigente de esta organización Sergio Pampa ratificó que se aceptó el convenio con el Gobierno, porque se viabilizó la mayoría de las demandas de los yungueños.   

El ministro de Gobierno, Carlos Romero, expresó su satisfacción y dio por consolidado el acuerdo con los cocaleros en la conferencia de prensa junto a varios dirigentes yungueños.

El acuerdo, que dispone 14.300 hectáreas de coca para La Paz y 7.700 para Cochabamba, fue firmado en la madrugada por los ministros y dirigentes, pero en horas de la mañana las bases cocaleras quemaron el documento y rechazaron el convenio.

El ejecutivo de Cofecay aseguró que, luego de hacerse las consultas, la mayoría de los cocaleros está de acuerdo con el convenio firmado con el Gobierno.

Agregó que el 80% de los cocaleros que marcharon en La Paz ya se están replegándose a sus lugares de origen.

En la conferencia de prensa no estuvo el presidente de Adepcoca, Franclin Gutiérrez, quien fue acusado por el Gobierno de golpista. Al respecto, el ministro Romero recordó que este dirigente ya firmó el acuerdo.

Los yungueños instalaron un cerco a la Plaza Murillo el viernes de la anterior semana, en rechazo al proyecto de ley del Gobierno que daba 13 mil hectáreas a La Paz y 7 mil a Cochabamba. En conflicto se tornó violento el lunes y martes con gasificaciones y destrozos en inmuebles policiales.

Luego de la violencia, la dirigencia y el Gobierno se sentaron a dialogar y acordaron subir los límites de cultivos de coca. Dicho pacto será convertido en ley por la Asamblea Legislativa.