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Las personas con discapacidad, que mantienen una vigilia cerca a la plaza Murillo, recaudaron alrededor de 21 mil bolivianos en su campaña solidaria y anunciaron que el viernes 29 de julio dejarán La Paz luego de tres meses de vivir en la calle por un bono mensual de 500 bolivianos.
La dirigente Rossmery Huarita expresó el agradecimiento de este sector con el pueblo paceño, que los acogió y aportó para que los discapacitados tengan algo de dinero para volver a sus vidas normales en sus respectivas regiones.
Explicó que en el transcurso de este jueves se repartirá el dinero recaudado entre los miembros de la vigilia. Dijo que a su juicio quienes estuvieron más tiempo deben recibir más.
Huarita destacó que la Iglesia Católica decidió apoyar a los discapacitados con los pasajes para sus viajes.
La despedida
“No hemos perdido la batalla, solamente estamos yendo a descansar”, manifestó la dirigente.
El viernes habrá una conferencia de prensa en la vigilia para que los discapacitados se despidan de La Paz.
Huarita aseguró que se trata de un “hasta lueguito” porque harán el seguimiento del proyecto de ley entregado a la Asamblea para que se les otorgue el bono mensual que exigen.
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