El Regreso

Por Rosa Talavera Simoni

Tomo para esta columna, el título de esa entrañable canción de Matilde Casazola, con la que tantos bolivianos que salimos del país, en distintos momentos y por distintas razones, nos hemos sentido emocionados al volver.  Regresé a Bolivia, a finales de 1989, después de10 años de ausencia yregreso, en este día de este tan singular año 2019, a escribir una columna, gracias a la invitación de InésGonzález, Directora Ejecutiva de ERBOL.

Mis primeras columnas (1989-90), fueron publicadas en Presencia, diario en el que con generosidad me acogieron Jesús Urzagasti y Ana María Romero.  Entre 1994 y 2004, escribí una columnasemanalen La Razón, que llamé Dialogando con el Fiscopues, en ese época mi trabajo profesional transcurrió en el ámbito tributario y todavíase podía dialogar con el ahora todotodo poderoso Servicio de Impuestos Nacionales.  

Escribir una columna puede ser divertido, gratificante, desafiante y hasta, pero también estresante, pues es un compromiso ineludible, la columna debe estar bien escrita, decir algo relevante y, deseablemente, tener una pizca de buen humorpues es un compromiso ineludible y el columnista debe decir algo relevante..  El columnista, por otra parte, debe estar atento a los sucesos locales, nacionales e internacionales, reflexionar y documentarse acerca de ellos y mantener una línea de pensamiento coherente. Entre 2005 y 2010, las tareas que desempeñé como parte del equipo del alcalde Juan Del Granado, no dejaron tiempo para elucubraciones periodísticas.

Terminado mi trabajo en la municipalidad paceña, volví a emigrar, esta vez a Santa Cruz, donde mi actividad transcurrió por sendas menos intelectuales y, si se quiere, más hedonistas.  Sin embargo, nunca dejé de leer a mis columnistas favoritos: Andrés Gómez, Rafo Archondo, Lucia Sauma, Juan A. Morales, Fernanda Wanderley, Roger Cortez, Carmen B. Ruiz, Javier Torres Goitya,Karen Longaric, Raúl Peñaranda, Hugo Del Granado, Carlos Miranda, Horst Grebe, Maria Teresa Zegada, Gonzalo Mendieta, Lourdes Montero, Alfonso Gumucio, JorgePatiño, Maggy Talavera, Fernando Prado, Guillermo Dávalos, Lupe Cajías, Carlos Hugo Molina, Carlos Valverde, Rafael Puente.

Califiqué arriba,al 2019 como un año singular, pues los bolivianos enfrentamos el desafío más significativo de las últimas décadas: evitar que Bolivia transite hacia una situación que debilite grave y quizás irremediablemente, sus perspectivas de desarrollo y bienestar.  En la primera línea de respuesta a este desafío ha estado el buenperiodismo.  Todos sabemos del trabajo de periodistas que, en condiciones financieras muy difíciles y casi exclusivamente por medios digitales, se están jugando el todo por el todo para mantener espacios de información y opinión independientes. También están en esa trinchera -aunque menos expuestos-los columnistas, aportando, día tras día, elementos de juicio e información para que los lectores elaboremos un mejor criterio sobre la realidad que nos circunda.Me uno pues, desde ERBOL, a este conjunto de obreros de la palabra para contribuir con mi granito de arena a construir un mejor país.