Opinion

BOLIVIA EN PROSPECTIVA
A ojos vista
Mario Mamani Morales
Martes, 28 Octubre, 2014 - 19:17

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¿Cómo quiere ver, sentir y vivir en Bolivia de aquí a cinco años? Obvio que tendremos un lustro más adicionados a nuestra edad, no pocos estaremos jubilados, otros estarán comenzando a trabajar por primera vez. Los adolescentes que hoy tienen trece años emitirán su voto para elegir presidente y los que compongan la Asamblea Legislativa Plurinacional; pero también habrá gente que se habrá ido de esta experiencia terrenal. Lo cierto es que el tiempo corre inexorable.

Todo cuanto obremos hoy determinará  nuestro futuro, tanto personal, familiar y la corresponsabilidad que tenemos con nuestro país. No podemos dejar de lado que concebir el futuro de Bolivia no sólo es cuestión de los políticos sino también de la gente que camina con los pies sobre la tierra, vive la realidad en las calles, el trabajo, el barrio y tantas cosas que son los desafíos cotidianos.

Si las cosas van como hasta el presente, la economía boliviana habrá mejorado. Los hidrocarburos seguirán siendo el pilar para los ingresos para las arcas del Estado, añadido a los logros que se realicen a través del valor agregado: la petroquímica, la generación de energía para abastecer no sólo a las necesidades en el país sino para vender el excedente a los países vecinos que sí lo necesitan.

La minería continuará siendo también otra posibilidad interesante como hasta hoy, se prevé que el mercado internacional no tendrá mayores alteraciones. Se abrirán muchos yacimientos y los ya descubiertos estarán en plena explotación, por ejemplo Mallku Kota y alrededores donde existen ingentes reservas. ¿Qué ocurrirá con el Cerro Rico de Potosí?

Es probable que San Cristóbal pase a manos del Estado para que los millones de dólares que extranjeros se llevan hoy  beneficie a los bolivianos, está visto que los privados nunca piensan en sacar de la pobreza a la gente que está en alrededores de la empresa, existe mucha diferencia entre quienes están dentro del cerco milimetrado de este pueblo y los que viven a pocos kilómetros, estos deben seguir migrando a Chile si quieren mejorar su economía. Claro que tampoco se conoce dónde van a parar las regalías o beneficios que se dejan para la región, aunque sean migajas.

De aquí a un lustro también tendremos a los bachilleres genuinos como resultado del enfoque de la educación sociocomunitaria y productiva, para ese tiempo el sector docente ostentará títulos de licenciatura, también habrán máster y doctores en pedagogía. ¿Se imagina cómo funcionará nuestro sistema educativo?

Siempre en este divagar de la toma de conciencia y la reflexión de un porvenir deseable, convengamos que si todo marcha así como hasta ahora  en relación de los últimos años, no habrá comunidad que no tenga energía eléctrica, por tanto la comunicación mejorará significativamente, tendremos al menos dos satélites, uno para ciencia y la educación y otro para controlar nuestras fronteras, entre otras cosas. Los celulares que hoy utilizamos como última generación serán una reliquia, la ciencia y la tecnología avanzará a pasos agigantados. Es probable que las líneas del teleférico que hoy luce La Paz sean superadas con subterráneos, trenes eléctricos, transporte en las calles con buses de última generación. Claro que todo esto dependerá de la proactividad de las autoridades locales; se advierte que para ello se perfilan Santa Cruz, Cochabamba y otras ciudades que se convertirán en metrópolis.

Quienes no asumamos una actitud activa hacia el mañana, no preveamos el camino a seguir nos adicionaremos a los analfabetos de este Siglo, es decir, la prospectiva nos dejará lejos, es decir, los objetivos se prevén muchos más desafiantes que los que hemos tenido hasta el presente.

¿Se festejará la salida del próximo quinquenio del gobierno de Evo y el MAS-IPSP al igual como se continúa haciendo por el triunfo en las urnas del último 12 de octubre? ¿Habrá otra reelección? ¿Se unirán los partidos denominados de oposición? ¿Será una realidad el bipartidismo en nuestro Estado? ¿Cuáles serán los valores y reglas que rijan de aquí a esos años?

Si el amodorramiento no nos domina es justo despertar visiones y alternativas de futuro.