Con la pronta llegada de vehículos con tecnología Flex a Bolivia, surge la inquietud de conocer más acerca de esta modalidad que combina los combustibles fósiles y los biocombustibles.

Estos vehículos usan como alternativa el etanol, que se produce principalmente a partir de materias primas vegetales. Estas materias primas pueden variar según la región, la disponibilidad local y los recursos agrícolas.

Entre las materias primas más comunes de este combustible están las siguientes:

Caña de azúcar
La caña de azúcar es una de las materias primas más utilizadas en la producción de etanol, especialmente en países como Brasil. El jugo de caña de azúcar se extrae y fermenta para producir etanol.

Maíz
En Estados Unidos, el maíz es la principal materia prima para la producción de etanol. El almidón presente en los granos de maíz se convierte en azúcares que luego se fermentan para producir etanol.

Remolacha azucarera
En algunas regiones de Europa, la remolacha azucarera se utiliza para producir etanol. Al igual que la caña de azúcar, el jugo de remolacha se fermenta para obtener etanol.

Trigo
En ciertas áreas, el trigo también se utiliza en la producción de etanol. El proceso es similar al del maíz, donde el almidón se convierte en azúcares fermentables.

Sorgo dulce
Este cultivo, similar al maíz, se utiliza en algunas regiones para producir etanol. El proceso de producción es similar al del maíz y se basa en la fermentación de los azúcares presentes en el sorgo dulce.

Biomasa lignocelulósica
Además de las materias primas mencionadas anteriormente, se están investigando y desarrollando procesos para producir etanol a partir de biomasa lignocelulósica, como residuos agrícolas, madera y otros materiales vegetales no alimentarios. Estos materiales son ricos en celulosa y hemicelulosa, que pueden ser descompuestos en azúcares y luego fermentados para producir etanol.

La elección de la materia prima para la producción de etanol depende de diversos factores, incluida la disponibilidad local, los costos de producción, la capacidad de cultivo y las políticas gubernamentales. Además, es importante considerar la sostenibilidad y el impacto ambiental de la producción de etanol a partir de diferentes materias primas.