Secretaría ejecutiva del Convenio de Minamata expresa preocupación por exclusión indígena en el plan del mercurio

AGENCIA DE NOTICIAS AMBIENTALES
Jimena Mercado
La secretaria Ejecutiva del Convenio de Minamata, Monika Stankiewicz expresó su preocupación al Estado boliviano y a todos los involucrados que participan en la elaboración del Plan de Acción Nacional (PAN) para la reducción del mercurio en la minería del oro en Bolivia, que a su vez respondieron que el país lleva un proceso eleccionario, y por tanto, el trabajo quedará pendiente para el próximo gobierno.
La información fue proporcionada a ANA, por la lideresa indígena Ruth Alípaz, quien se reunió en Santiago de Chile con la Secretaria Ejecutiva del Convenio de Minamata, para hacer seguimiento a la denuncia presentada ante esta instancia internacional, por la exclusión que sufrieron los pueblos indígenas en Bolivia, en la elaboración del PAN.
Alípaz Cuqui, vocera de la Coordinadora de Defensa Nacional de Territorios Indígenas Originario Campesinos y Áreas Protegidas (Contiocap) explicó que tuvo una reunión con Stankiewicz en el marco de los espacios disponibles de los “Diálogos de Minamata con Pueblos Indígenas, Comunidades Locales y Sociedad Civil” realizados en paralelo con la Reunión Regional Preparatoria para América Latina y el Caribe previo a la Sexta reunión de la Conferencia de las Partes del Convenio de Minamata sobre el Mercurio.
“Como Contiocap y aprovechando estos espacios se pudo dialogar con la Secretaria Ejecutiva del Acuerdo de Minamata que está participando del evento, se le hizo llegar el documento a esa Secretaría y precisamente se aprovechó para hacer la consulta, conocer la reacción que se ha tenido en relación al documento”, explicó.
La dirigente amazónica señaló que en documento oficial que se entregó a Monika Stankiewicz se hizo conocer el rechazo al plan del mercurio que elaboró el Gobierno junto a sus aliados cooperativistas mineros y la cooperación internacional, excluyendo a los pueblos indígenas del mismo, siendo que son los principales afectados por la contaminación minera.
“No solo por haber sido elaborado el PAN excluyéndonos, sino también por las implicaciones de que la Organizaciones de Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI), que debería exigir o garantizar al Estado boliviano que se cumplan con todos los procedimientos como es la consulta previa libre e informada a los pueblos indígenas, ya que se trata de una política pública”, indicó.
Entre otros actores que trabajan en el PAN para la reducción del mercurio se encuentran el Ministerio de Minería y Metalurgia, el Ministerio de Medio Ambiente y Agua, así como el Ministerio de Relaciones Exteriores por parte del Estado boliviano, Planet Gold como apoyo técnico de la mano de ONUDI y el acompañamiento de la Comunidad Andina. El trabajo cuenta con el apoyo técnico de la fundación MedMin.
En el PAN para la reducción del mercurio en la minería artesanal a pequeña escala (MAPE) se plantea reducir el uso del tóxico en 60% hasta el 2031. Sin embargo lo que se observó también desde la Contiocap es que la minería aurífera en el país es mecanizada e intensiva, incluso con capitales extranjeros involucrados.
En ese marco, Alípaz señaló que la Secretaria Ejecutiva del Convenio de Minamata le informó que ya se hizo llegar la preocupación al Responsable de la ONUDI en Bolivia (Diego Álvarez) y a todos los involucrados del PAN, quienes respondieron que en Bolivia se lleva un proceso de elecciones y que después de las elecciones se continuarán los trabajos.
“Han respondido que tienen planificado involucrar a los pueblos indígenas, pero que eso seguramente será con el próximo gobierno”, expresó.
La respuesta de los involucrados en el PAN, así como la inasistencia del Estado boliviano a las reuniones preparatorias oficiales rumbo a la Sexta Conferencia de Partes COP6 del Convenio de Minamata, según la lideresa indígena, muestran la falta de compromiso por atender esta problemática que afecta principalmente a los territorios indígenas amazónicos, y también a la población en su conjunto.
“La excusa que presenta es inaceptable, donde el Estado boliviano no está presente acá en esta reunión de los países de Latinoamérica que están tratando con miras a la COP6 del Convenio de Minamata, lo cual nos llama la atención y preocupa porque no está interesado en atender estos temas que son esenciales para el pueblo boliviano”, lamentó.
Más allá de cualquier Gobierno que tenga que asumir, Alípaz dijo que es una responsabilidad del Estado ante la comunidad internacional y ratificada por ley en el país.
“No importa que mañana deje el Gobierno, es un acuerdo que se ha asumido como Estado, la ausencia dice mucho, el Estado boliviano ha sido presionado para realizar el Plan de Acción Nacional de reducir el mercurio, pero sigue con la misma conducta”, aseveró.
Se ha hecho conocer que en Bolivia aparte de excluir a los pueblos indígenas, el PAN no se ha centrado en la reducción de emisiones de mercurio para cuidar la salud y el medioambiente, sino que está abocado a aumentar la productividad minera.
La delegación boliviana estuvo integrada por Ruth Alípaz Cuqui de la Contiocap; el director ejecutivo del Centro de Documentación e Información Bolivia (Cedib), Óscar Campanini, institución que aportó con amplia investigación sobre el negocio del mercurio, así como estudios científicos junto a la Universidad de Cartegena de Colombia sobre los niveles de contaminación por mercurio en indígenas de los pueblos ribereños de la Amazonía, y Wilson Torres del pueblo Ese ejjas.
El encuentro fue organizado por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) que ha garantizado la participación del Relator de Sustancias Tóxicas, Marcos Orellana, así como expertos
Convenio de Minamata
Debido a su estrecha relación con los recursos naturales, los pueblos indígenas, así como las comunidades locales se encuentran entre los grupos más vulnerables del mundo frente a los impactos de la contaminación por mercurio. Esta contaminación representa una amenaza urgente, debido al daño irreversible que causa a las personas, los Pueblos, la fauna y los ecosistemas enteros.
El mercurio elemental es un metal líquido altamente tóxico y persistente. La inhalación de vapores de mercurio elemental y el consumo del metilmercurio presente en el pescado pueden provocar graves efectos en la salud y la vida de las personas. La llamada enfermedad de Minamata, una intoxicación grave por mercurio que causa trastornos neurológicos y puede provocar parálisis, estado de coma y la muerte, suscitó la preocupación por la contaminación por mercurio a escala mundial, lo que en último término impulsó la negociación del Convenio de Minamata sobre el Mercurio.
El objetivo de dicho tratado es proteger la salud humana y el medio ambiente de las emisiones y liberaciones antropógenas de mercurio y compuestos de mercurio. Lamentablemente, la fácil disponibilidad de mercurio comercializado ilícitamente, el aumento del precio del oro y la falta de transparencia en la cadena de suministro del oro crean condiciones propicias para que actores externos establezcan operaciones ilegales de minería artesanal y en pequeña escala en tierras y territorios indígenas.
Para los Pueblos Indígenas, así como para las comunidades locales, las prioridades urgentes incluyen combatir el comercio ilegal de mercurio y garantizar sus derechos, incluido el derecho a un medio ambiente limpio, saludable y sostenible.