De manera sorpresiva, el presidente del Perú, Pedro Castillo, anunció este miércoles el cierre temporal del Congreso y se instauró un gobierno de emergencia. La decisión sucede a pocas horas del debate de la moción de vacancia y en medio de acusaciones en su contra.

"Se dictan las siguientes medidas: disolver temporalmente el Congreso de la República e instaurar un gobierno de emergencia excepcional; convocar en el más breve plazo a un nuevo Congreso con facultades constituyentes para elaborar una nueva Constitución en un plazo no mayor de nueve meses", dijo el mandatario peruano.

Castillo dispuso que a partir de la fecha y hasta que se instaure el nuevo Congreso se gobernará mediante decretos de ley.

Decretó el toque de queda a partir de este miércoles 7 de diciembre desde las 22.00 hasta las 04.00 del día siguiente. De igual modo, se declara en reorganización el sistema de justicia, es decir, el Poder Judicial, el Ministerio Público, la Junta Nacional de Justicia y el Tribunal Constitucional.

También precisó que todos los que poseen armamento ilegal deberán entregarlo a la Policía Nacional del Perú en el plazo de 72 horas, por lo que quien no lo haga "comete delito sancionado con pena privativa de la libertad y se establecerá en el respectivo decreto ley".

"La Policía Nacional con el auxilio de las Fuerzas Armadas dedicarán todos sus esfuerzos al combate real y efectivo de la delincuencia, la corrupción y el narcotráfico, a cuyo efecto, se les dotará de los recursos necesarios", añadió, segun la agencia Andina.