Exministros de Evo Morales denunciaron casos de presunta “megacorrupción” en Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPFB), con irregularidades en contrataciones y sobreprecios, por lo cual entregaron documentación a la facción del MAS afín al expresidente para hacer una investigación desde el Legislativo.

El exministro Carlos Romero denunció que una primera irregularidad es que la empresa estatal habría dejado de lado las licitaciones públicas, para proceder a hacer contrataciones mediante invitaciones directas, incluso desde fuera del territorio boliviano en la oficina instalada en Argentina.

Denominó esta modalidad como de “contratos megacorruptos que están desviando a bolsillos particulares los dineros del pueblo boliviano”.

En otra irregularidad, Romero afirmó que existiría una sobreimportación de combustibles. Señaló que la importación de gasolina subió en más de 100% en volumen y casi 300% en dinero, mientras que en dièsel el volumen de importación subió en 30%, pero el monto destinado se incrementó en 140%.

“Se está importando mucha más gasolina y diésel que lo que reflejan las cifras del mercado interno y de la demanda interna. Y además se está pagando precios elevadísimos, probablemente los más caros de la región en la importación de estos combustibles”, sostuvo.

Señaló, como tercera denuncia, que en la importación de combustible Premium se manejaba un precio de 14 dólares por metro cúbico durante la gestión de Evo Morales y hoy ese promedio se ha multiplicado a 200 dólares.

Romero consideró que los precios exagerados llegan no sólo a los trader, subtrader, que operan en la venta, sino también a bolsillos de funcionarios corruptos de YPFB y del Ministerio de Hidrocarburos.

Acusó al presidente Luis Arce y al vicepresidente David Choquehuanca de callar al respecto.

Otra presunta irregularidad, explicada por Romero, consiste en que las adquisiciones de combustibles en Bolivia habrían quedado en manos de dos empresas expulsadas de varios países por investigaciones de corrupción.

Aseveró que el 90% de la compra de combustibles se hace a través de una empresa intermediaria, donde “extrañamente” trabajan exfuncionarios de YPFB que tenían denuncias.

Romero dijo que para indagar estas denuncias acuden a la bancada que está firme  junto a Evo Morales.

De parte de la bancada ‘evista’, la diputada Gladys Quispe, anunció que se interpondrá una petición de informe escrito a las instancias competentes, pero también se remitirá el caso a la Fiscalía General para su investigación de oficio.

Quispe aseguró que también se conformará una comisión mixta de la Asamblea para la investigación de estos casos.

“No vamos a permitir nosotros, como diputados leales al Instrumento Político, que vengan personas a aprovechar circunstancias cuando estamos sufriendo en las calles, en filas para comprar dólar”, reclamó.//jm