Evo Morales aseveró este jueves en Argentina que legalmente es presidente de Bolivia y que la orden de aprehensión en su contra no procede. 

“Esta orden es injusta, ilegal, inconstitucional, no procede. Legalmente yo sigo siendo presidente, por lo tanto debe pues cumplir con los procedimientos”, sostuvo Morales en conferencia de prensa.

El ser presidente implicaría que debe ser procesado en juicio de responsabilidades, es decir, de forma privilegiada con previa autorización de la Asamblea.         

Afirmó que se ha realizado el análisis legal y que, si bien presentó su renuncia el 10 de noviembre, la misma no fue aceptada por la Asamblea y, además, considera que no se realizaron correctamente los procedimientos de sucesión constitucional.

Sin embargo, la Fiscalía ya aclaró que los hechos por los cuales se pide la captura de Morales se registraron cuando ya no era presidente, por llamadas que tuvo con Faustino Yucra, en las cuales habría instruido cercar ciudades y dejarlas sin alimento.

El fiscal general Juan Lanchipa aseveró que en este caso Morales es procesado por la vía ordinaria, y no por juicio de privilegio. Se lo acusa de sedición y terrorismo.

Patzi cree que tiene problemas psicológicos

El gobernador de La Paz, Félix Patzi, señaló que “muy probablemente” Morales tiene problemas psicológicos, porque aún se considera presidente.        

Señaló que es un “problema muy serio” de parte del exmandatario. “Tiene que pisar la realidad, y la realidad es que ya no es presidente”.