Mediante carta dirigida a entidades estatales de Bolivia, el Grupo de Búsqueda de Vehículos (GBV) solicitó la devolución de dos vehículos robados en Chile que estaría en poder de autoridades bolivianas, además de la indemnización ganada en juicio por un camión.

Dicho Grupo trabaja para clientes víctima de robo de vehículos. Es el mismo que detectó que policías bolivianos participaron del tráfico de coches robados en Chile.

En estos casos, se denuncian irregularidades, como presuntas extorsiones que habrían realizado funcionarios bolivianos para devolver los coches.

En caso de no aceptarse su pedido, el GBV advirtió que realizará una rueda de prensa internacional, para mostrar la corrupción que existe para el regreso de los móviles robados.

El caso del camión

Según el GBV, un camión Volvo FH12 fue tobado en Chile y comisado en Bolivia, sin embargo, cuando el dueño concurrió a Aduana, le expresaron que no sabían dónde estaba el vehículo.

Después de unos años, de acuerdo con esta información, la Aduana indicó que el camión estaba siendo utilizado por el Ejército de Bolivia y no se sabía quién se los había pasado para su uso.

Se realizó un juico en contra de la Aduana, en el cual se dispuso que la entidad estatal pague el costo del camión más los daños y perjuicios causados a la víctima.

Cuando se pidió el dinero, la Aduana alegó que no tenía recursos y que devolvería el camión. Pero, la víctima insistió en recibir dinero al enterarse que el vehículo estaba en mal estado y sin sus partes mecánicas producto de la utilización de años de servicio en el Ejército, informó el GBV.

Los otros dos casos

El Grupo chileno pidió la devolución de una camioneta Mitsubishi, que fue robada en Chile y que fue comisada por autoridades de la Aduana en la región de Avaroa, presuntamente por no realizar el pago de un soborno de 3.000 dólares.

Según el relato del GBV, la camioneta había sido recuperada de manos de la Policía de Uyuni, puesto que era usada supuestamente para fines particulares. Los policías habrían entregado el coche por miedo a ser denunciados.

La carta sostiene que cuando se procedió a la recuperación de esta camioneta, se sorprendió a los aduaneros desmantelando coches, lo cual derivó en la detención de nueve funcionarios, hecho que se hizo público anteriormente.

De acuerdo con el GBV, cuando se comisó el coche, los funcionarios de la Aduana solicitaron que la Policía, en la región fronteriza de Avaroa, incaute la documentación del vehículo para evitar que se denuncie en otras instancias.

El tercer caso es de una camioneta Dodge, que también fue robada en Chile y comisada por las autoridades de Aduana.

Según el GBV, luego de transcurrir casi dos años de tramitación de documentos en DIPROVE y pagar sobornos, se emitió un oficio para la devolución de la camioneta robada y ser trasladada hasta Chile.

Sin embargo, cuando la víctima fue a Bolivia a a recuperar su vehículo, en la Aduana le informaron que no sabían dónde estaba su camioneta.

El Grupo denunció que la víctima pasó cuatro años sin que le regresen su camioneta robada y además le extorsionaron 5.000 dólares para la devolución

La carta con estos datos tiene fecha de 25 de mayo de 2022 y tiene como destinatarios al Consulado de Bolivia en Chile, la Aduna, Diprove y la Cancillería.