Internacional
Bachelet califica el hecho de extraño
5 ataques a iglesias chilenas a días de llegada del Papa
Foto: AP.


Viernes, 12 Enero, 2018 - 19:56

Santiago de Chile despertó este viernes con una noticia que la presidenta Michelle Bachelet calificó de “extraña”. Tres iglesias de la capital fueron atacadas por la madrugada, a tres días de la llegada del Papa Francisco, que entre el lunes y el jueves estará en Chile para luego viajar a Perú. Los templos católicos que sufrieron ataques, ya sea incendiarios o explosivos, se hallan en los municipios de Recoleta, Peñalolén y Estación Central. Ya por la mañana, la policía encontró una nueva bomba en una parroquia de Estación Central y otra en el municipio de Santiago Centro, que no llegaron denotar. “Las próximas bombas serán en tu sotana”, señalaba uno de los escritos hallados.

“Esto de anoche es muy extraño, no es algo que uno pueda identificar como un grupo específico”, señaló Bachelet, que hizo un llamamiento a que la visita del Papa Francisco se viva “en un clima de respeto, solidaridad y de alegría entre nosotros”. “Van a ser tres días para que Chile se encuentre al comenzar un año que nos traerá desafíos, pero también beneficios para las familias”, agregó la mandataria, que el martes a primera hora lo recibirá en La Moneda.

Chile ha preparado cada detalle para la visita del Papa, que en Santiago tiene contemplado oficiar una misa para unas 400.000 personas en el Parque O’Higgins.

De acuerdo a la Fiscalía Sur, a cargo de la investigación de los casos, se sospecha de la rearticulación del Movimiento Juvenil Lautaro (MJL), una agrupación de izquierda que en la dictadura de Pinochet estaba por el camino armado. En noviembre y diciembre pasado, el mismo grupo habría atacado a varias sedes policiales del país. Para carabineros, en tanto, se trataría de grupos anarquistas.

Los ataques han sido condenados por diferentes sectores. El presidente electo, Sebastián Piñera, a través de Twitter indicó que “el odio y la intolerancia no pueden primar por sobre el respeto y el Estado de Derecho”. La Iglesia católica local , en tanto, mediante un comunicado lamentó el vandalismo “Nos duelen profundamente estos hechos, que contradicen el espíritu de paz que anima la visita del Papa al país. Con humildad y serenidad pedimos a quienes han realizado estos actos –que consideramos no representan en absoluto el sentir de la inmensa mayoría de la población–, reflexionar sobre la necesidad de que exista respeto y tolerancia entre todos, para construir una patria de hermanos", señala el documento del Arzobispado de Santiago.

El Gobierno anunció una querella y, a través del subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, anunció que se reforzarán las medidas de seguridad en los templos católicos. Aunque los ataques no provocaron grandes daños ni dejaron heridos, para la Fiscalía se trata de hechos “preocupantes”. “Chile va a recibir la visita no solamente del líder de la Iglesia católica, sino que de un jefe de Estado”, señaló el fiscal jefe de la zona Metropolitana Sur, Raúl Guzmán.

La visita del Papa Francisco es la segunda que realiza un sumo pontífice al país sudamericano, luego de que Juan Pablo II arribara al país en 1987, a fines de la dictadura de Augusto Pinochet. En esta ocasión estará en Santiago, pero visitará dos otras ciudades: Temuco, en el sur, donde espera hacer un gesto al pueblo mapuche, y la ciudad nortina de Iquique, elegida por ser una localidad con una fuerte presencia de inmigrantes y donde se reuniría con víctimas de la represión en el régimen militar (1973-1990).

Aterrizará en un país que se ha alejado de la Iglesia católica. Aunque en dictadura gozaba de respaldo popular, por su activo papel a favor de los perseguidos, en las últimas décadas ha perdido fuerza en la sociedad. De acuerdo al estudio Latinobarómetro dado a conocer este viernes, de todos los países latinoamericanos Chile es el que tiene la peor valoración de Jorge Bergoglio y la menor confianza en su institución. En las semanas previas a la visita, por ejemplo, se ha criticado no solo el costo de su viaje, sino la decisión de las autoridades de declarar días de fiesta por la llegada del Papa, considerando que Chile es un Estado laico.

“Por el Papa 10 mil millones y el pueblo muriendo en las poblaciones”, señalaba un rayado de una muralla cercana a una de las iglesias atacadas.

Fuente: El País