Mesa dice que no ejecutó la carretera Roboré-El Carmen

El expresidente Carlos Mesa respaldó la decisión de llevar adelante una amplia y profunda investigación sobre el proceso de contratación de la empresa brasileña ARG Camargo.-Correa para la construcción de la carretera Roboré-El Carmen.  

“Respaldo plenamente la decisión de llevar adelante una amplia y profunda investigación sobre este tema por las instancias jurisdiccionales que correspondan, para que se esclarezca cualquier duda respecto a las denuncias de corrupción difundida”, dice en cuenta tiwtter difundido este lunes.  

Afirmó que queda claro que en su gobierno se inició la adjudicación y la firma de contratos correspondientes para la ejecución de los tramos señalados, pero la imposibilidad de conseguir el financiamiento para la contraparte estatal impidió que estos entraran en vigencia.

Afirma que fue el gobierno de Eduardo Rodríguez Veltzé el que adjudicó finalmente las obras y suscribió los contratos correspondientes.

El exmandatario admitió de haber promulgado 4 decretos para garantizar la realización de los tramos Roboré-El Carmen y El Carmen-Arroyo Concepción, que forman parte de la carretera Santa Cruz-Puerto Suárez, uno de los proyectos de infraestructura más relevantes del país, que fue declarado como prioridad nacional mediante la Ley 1105 de 22 de septiembre de 1989. 

Una vez que fueron concluidos, vincularon las zonas productoras agroindustriales con la frontera brasileña, por donde transita casi el 70% de nuestras exportaciones.

Ratificó la firma de los DS 27693 de 20 de agosto de 2004 y 27794 de 15 de Octubre de 2004, que instruían al Servicio Nacional de Caminos (SNC) licitar y suscribir el contrato para la construcción y supervisión de los tramos Roboré-El Carmen y El Carmen-Arroyo Concepción (233 Kms), con financiamiento del 80% provisto por las empresas proponentes y el 20% que debía ser gestionado por el Ministerio de Hacienda.

Asimismo firmó el DS. 27982 del 18 de enero de 2004, y el DS 27997 del 1° de febrero de 2004, que aceptaban las condiciones de financiamiento de los proponentes y autorizaban al SNC a proseguir con el proceso de licitación de ambos tramos.

Dice que a partir de diversas gestiones directas, pudo conseguir el compromiso del gobierno de Brasil para financiar, con los créditos PROEX, la construcción de las obras. Con esta garantía, el SNC prosiguió con el proceso, en base a un pliego de condiciones y criterios de evaluación elaborados íntegramente por la entidad.

Cita que el 27 de enero y el 14 de marzo de 2005, el SNC firmó los contratos para la construcción de los tramo Roboré-El Carmen, con el consorcio ARG-Camargo Correa; y el contrato para la construcción del tramo El Carmen-Arroyo Concepción con el consorcio IASA-Odebrecht, respectivamente.

Sostiene que ambos contratos contaban con el 80% del financiamiento del PROEX, pero no del 20% de aporte local, por lo que incluyó una cláusula de condición suspensiva, es decir, que no podían ejecutarse y los trabajos no podían empezar, hasta que el Estado obtuviera esos recursos y depositara la garantía respectiva.

Aclara que debido a la grave situación económica del Estado, durante los siguientes cuatro meses de su gestión, no fue posible conseguir el financiamiento para cumplir con la parte de los recursos, razón por la que los citados contratos no entraron en vigencia.