Gobierno de servicio, de amor

Generalmente, al finalizar el mes de noviembre se celebra la Fiesta de Cristo Rey. Paradójicamente ese día se nos ofrece a los creyentes: la imagen de Jesús reinando desde una cruz.

Se trata de un reinado totalmente distinto. ¿Cuál es la enseñanza fundamental que tenemos que rescatar?.

No podemos salvar derramando la sangre de otros

El rey de los cristianos nos enseña que al ser humano se le salva derramando por él nuestra propia sangre, y no derramando la sangre de otros.

Jesús es un Rey que establece su reino de justicia y paz a base de su propia sangre.

Jesús muerto en la cruz nos muestra que murió en una actitud de respeto total al ser humano. De esta manera nos desenmascara e interpela a todos contra toda violencia.

Jesús no ha creído nunca en la fuerza, en la violencia o el terror como solución para establecer una sociedad más justa, libre y fraterna. 

La fiesta de Cristo Rey nos debía hacer entender que la violencia deshumaniza al que la práctica; y desata una lógica de violencia siempre mayor. 

Para Jesús Rey, lo importante no es herir y aplastar al otro, sino desarmarlo. 

Su trono es una cruz

La Cruz no es una especie de trofeo que mostramos a otros con orgullo. Al contrario, es el símbolo del Amor crucificado de Dios que nos invita a seguir su ejemplo.

Jesús nos pide de manera insistente no besar la Cruz sino cargar con ella. 

Cristo rey nos llama a luchar por todos los medios para que la violencia no sea necesaria. 

No nos está permitido acercarnos al misterio de la Cruz de manera pasiva, sin intención alguna de cargar con ella. 

No existe un cristianismo sin Cruz

Para los seguidores de Jesús, reivindicar la Cruz es acercarse servicialmente a los crucificados.

Es introducir justicia donde se abusa de los indefensos; 

Es reclamar compasión donde sólo hay indiferencia ante los que sufren. 

Hemos de aprender a venerar al Crucificado no en un pequeño crucifijo sino en las víctimas inocentes del hambre y de las guerras, en las mujeres asesinadas por sus parejas, en los que sufren violencia.