El joven guardameta de The Strongest Diego Valdivia, vivió un momento especial al debutar oficialmente con el primer plantel atigrado tras la salida de Rodrigo Banegas por lesión el pasado sábado frente a Real Oruro. Valdivia confesó haber estado ansioso al inicio, pero seguro de que estaba preparado para responder a la altura del reto. “Sabía que estaba preparado para entrar y hacer de la mejor manera las cosas”. Su ingreso se dio tras una larga espera de seis meses sin minutos oficiales, pero llegó en un momento clave, en la previa del clásico paceño ante Bolívar.

Valdivia aseguró que continúa trabajando con constancia y dedicación, sin importar si le toca estar bajo los tres palos o esperar su oportunidad. “Si llega Rodri, seguramente él juegue porque viene siendo titular y hay que desearle lo mejor. Pero yo entreno toda la semana para jugar”, destacó, demostrando madurez y compromiso con el proceso del equipo. También resaltó la importancia del grupo y el respaldo del cuerpo técnico, que le brindaron confianza al momento de su ingreso.

Respecto al inminente clásico frente a Bolívar, Valdivia reconoció que, a pesar del mal momento del rival, se trata de un partido especial que se debe afrontar con seriedad. “Puede venir golpeado, pero un clásico es un clásico, y vamos a salir a dar todo”. Evitó referirse a las polémicas arbitrales que han marcado recientes fechas del torneo, y prefirió enfocarse en el rendimiento colectivo: “Nosotros vamos a salir a dar todo nada más”.

Finalmente, el arquero reveló que la primera llamada tras el partido fue para su madre, quien siempre lo apoya y se emociona más que él. “A mi madre la llamé, que siempre está ahí apoyándome, y se pone más nerviosa que yo”, confesó emocionado. Con este debut, Valdivia no solo cumplió un sueño personal, sino que también dejó en claro que tiene la actitud y el carácter para ganarse un lugar en el primer equipo Gualdinegro.