Action Aid Bolivia reúne a defensoras de derechos en un espacio de resistencia y presenta estudio sobre las violencias que sufren

Con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), Alianza por la Solidaridad/ Action Aid convocó a 140 mujeres defensoras de derechos humanos —activistas, lideresas indígenas, periodistas, policías, artistas y promotoras comunitarias— en el Hotel Presidente de La Paz. El objetivo fue generar un espacio de resistencia, sanación colectiva y fortalecimiento de redes frente a las violencias estructurales que ponen en riesgo su labor y su integridad y además presentar el informe “¡Entonces, nos empezaron a amenazar!”, que documenta las formas de violencia sistemática que sufren estas defensoras en Bolivia.
El evento no solo reunió voces diversas, sino que se convirtió en un espacio de articulación política y sanación colectiva. Durante la apertura, Magalí Chávez, coordinadora de ActionAid Bolivia, subrayó que “defender derechos no solo es un acto de valentía, es un acto político”, recordando que las defensoras enfrentan agresiones por lo que hacen y por lo que representan.
El coordinador de AECID en Bolivia, Juan Pita, destacó el valor de estos encuentros como espacios “de introspección, alianza y esperanza colectiva”, afirmando que “este esfuerzo no es solo una financiación, es el reflejo del compromiso de muchas personas en España con las luchas de las mujeres en Bolivia”.
El estudio, elaborado por la investigadora Pilar Uriona, recoge testimonios de 14 mujeres defensoras de La Paz, Cochabamba y Sucre —incluyendo activistas indígenas, promotoras comunitarias y defensoras digitales—, y visibiliza cómo la violencia patriarcal opera desde diferentes frentes: amenazas, hostigamiento, criminalización, desprestigio y acoso digital.
Entre los principales hallazgos del estudio se destacan:
- En 2024 se registraron en Bolivia 84 feminicidios, 45.396 hechos de violencia familiar o doméstica, 6.939 violaciones y 3.390 casos de abuso sexual según datos de la Fiscalía General del Estado y el SNIS.
- Las defensoras enfrentan una doble vulnerabilidad: por su doble condición de mujeres y defensoras de derechos humanos.
- Se identifican formas específicas de violencia institucional, como la judicialización, campañas de desprestigio y acusaciones infundadas por parte de dirigentes varones y autoridades estatales.
- Las amenazas no solo afectan a las defensoras, sino también a sus entornos familiares y redes colectivas.
- Las mujeres entrevistadas señalaron como herramientas clave para su resistencia el autocuidado, el cuidado colectivo, las redes de apoyo, la formación legal y la visibilización pública.
El informe propone una agenda de protección integral basada en la creación de espacios seguros, el fortalecimiento de redes de apoyo feminista, la formación legal y digital, y la promoción de políticas públicas con enfoque interseccional y de género que reconozcan la labor de las defensoras y garanticen su seguridad.
El encuentro cerró con la presentación de la canción colectiva “Somos Canto y Resistencia”, creada homenajeando a las defensoras como símbolo de unión y esperanza. Con gran emoción, las participantes corearon y bailaron esta pieza que recoge sus voces y reafirma su compromiso con la justicia y la vida.
El evento concluyó con un llamado unánime a las autoridades bolivianas: proteger a las defensoras es proteger los derechos humanos. Porque, como reafirmaron las participantes, “defender la vida no es un crimen, es una responsabilidad colectiva”.
(Nota de prensa)