CEDIB advierte que el desarrollo petrolero de Mayaya Centro potenciará a la minería aurífera

AGENCIA DE NOTICIAS AMBIENTALES
Jimena Mercado
Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) ha anunciado una inversión inicial de aproximadamente $us 403 millones para el desarrollo del área no tradicional de Lliquimuni, además de ampliar la frontera exploratoria a Mayaya Centro en el departamento de La Paz. La infraestructura petrolera de desarrollarse, potenciará al sector aurífero y su ampliación en la zona, advierte Jorge Campanini del Centro de Documentación e Información Bolivia (CEDIB).
“Lo interesante es que la zona no es para nada tradicionalmente hidrocarburífera, sino, más bien es una zona que está bastante presionada por extractivismos vinculados al oro, donde la explotación es muy intensa (…). Entonces, lo que preocupa en realidad entre muchas otras cosas, es que el desarrollo del campo Mayaya Centro y su ampliación y transformación de la zona en área petrolera también potenciará la actividad aurífera”, afirma.
La estatal petrolera ha señalado que, en una primera etapa de producción temprana (proyectada para 2028), la Fase 1 Mayaya Centro vislumbra una producción de hasta 50 millones de pies cúbicos de gas por día (MMpcd) e incluye el tendido del Gasoducto Alto Beni – Caranavi, la construcción de instalaciones para la Planta de Gas – EPF (facilidades de procesamiento temprano) en la localidad de Alto Beni.
“Todo el desarrollo de un campo petrolero, la tecnología, la infraestructura caminera, que es una de las cuestiones claves, la energía, combustibles y demás va a generar una sinergia con el sector minero; es decir, el sector minero va a aprovechar esto para profundizar y consolidar su crecimiento. Y esto lo hemos visto en otras zonas cuyo resultado ha sido igual”, señala Campanini en entrevista con ANA.
En ese marco advierte que la sinergia entre el sector petrolero y el minero aurífero es bastante riesgoso para las comunidades y los municipios que están cerca de la zona denominada Mayaya Centro X1 y que se verán impactados porque transformará y/o modificará radicalmente ciertos equilibrios económicos, ecológicos, sociales,que todavía se mantienen, digamos, y al ingresar estas dos actividades, todo esto va a ser alterado y modificado.
“¿Qué es lo grave aquí? Primero que va a afectar gran parte de una zona productiva agroecológica en el departamento de La Paz que podría verse afectada por la construcción de un ducto y otras infraestructuras. Pero a mí lo que más me preocupa, además, y viendo otros casos similares, como en el Chaco boliviano, es que actividades como la minería u otras, puedan aprovechar toda esta infraestructura, toda esta logística, caminos y demás, justamente para ampliar o asentar con mayor contundencia sus actividades”, explica.
Los municipios de Palos Blancos y Alto Beni en La Paz se declararon libres de minería y ratificaron por ley municipal su vocación agroecológica, en tanto que Caranavi es conocida a nivel nacional como internacional como una zona productora de uno de los mejores cafés.
Con infraestructura petrolera, caminos, tendidos eléctricos y otras obras adicionales para Mayaya Centro, el sector aurífero sería el más beneficiado –dice Campanini- quien recuerda que las cooperativas del oro han sido las mimadas del Gobierno del Movimiento al Socialismo (MAS).
“El desarrollo de Mayaya, al final de cuentas, puede terminar siendo la punta de lanza de penetración a la Amazonía cuando se desarrolle hacia la Cuenca Madre de Dios, donde actualmente está en perforación dos pozos estratigráficos, los Tomachi X1 y el X2”, dice.
Licencias ambientales en tiempo récord
El investigador especializado en temas hidrocarburíferos afirma que le llamó mucho la atención la agilidad y la velocidad con la que se sacaron las licencias ambientales de los proyectos complementarios a Mayaya, justamente los pozos Mayaya centro X-2 y Mayaya centro X-3. En este proceso intervinieron el Ministerio de Medio Ambiente y el Ministerio de Hidrocarburos
“Han salido sus licencias ambientales pero en una velocidad increíble, única, desde la presentación del EEIA a la licencia no pasaron ni 10 dias (…). Eso hay que tomar en cuenta sobre el desarrollo del campo Mayaya y los planes que se están elaborando alrededor del mismo, entre ellos el tendido de ducto, la planta de gas, incluso en un primer momento el presidente (Luis Arce) habló del traslado del gas hasta la ciudad de La Paz y que existan las infraestructuras necesarias para procesarlo y distribuirlo o en su caso exportarlo”, apuntó.
En busca de crudo, antes que gas
La intervención del Estado en zonas no tradicionales de extracción hidrocarburífera, según el análisis de Campanini, se debe a la necesidad de generar mayores volúmenes de crudo (petróleo) ante los altos niveles de gasto público para la importación de diésel y gasolina, que osciló entre enero y junio de este año en más de 1.000 millones de dólares.
“Con alguna inversión de por medio se ha seguido insistiendo en buscar nuevas zonas donde explorar, dada la situación de escasa producción y de falta de resultados, sobre todo, principalmente, la zona tradicional”, dice.
En esa línea es la Amazonía la que se convierte en la zona no tradicional de exploración hidrocarburífera, la elegida por el Gobierno, para la penetración intensiva de actividad extractiva.
“El petróleo es el nuevo producto priorizado debido al problema crítico que hay vinculado a la importación, a la subvención, a la crisis de combustibles”, explica.
Sin mercados expectables
Jorge Campanini advierte que la apuesta del Gobierno en afectar una zona altamente importante para el ecosistema con el propósito de encontrar crudo y/o extraer gas, se realizará en un contexto sin mercado para el gas boliviano, más cuando esta´n en pleno desarrollo yacimientos como Vaca Muerta en Argentina y el Presal en Brasil.
“Con Brasil y Argentina ya no vamos a tener contratos de Estado a Estado, porque ellos ya están autoabasteciéndose en términos de gas. Vaca Muerta en Argentina, reemplazan de lejos lo que importaban desde Bolivia. Entonces, tendríamos que buscar otros mercados, otra forma de monetizar este gas. Entonces, aunque encontremos ahora, hoy, o dupliquemos o tripliquemos las reservas existentes, no podemos venderlo todavía”, subraya.
Actualmente el mercado de gas boliviano se reduce a varios pequeños contratos con empresas de Brasil y Argentina, lo cual no es sostenible según el investigador.
YPFB y sus expectativas
Armin Dorgathen, presidente interino de YPFB, calificó de histórico hallazgo de hidrocarburos gaseosos y líquidos que activa todo un plan de exploración de estructuras adicionales a Mayaya Centro, ubicadas en el Área No Tradicional Lliquimuni.
La perforación del pozo Mayaya Centro-X1 de Investigación Estratigráfica (MYC-X1 IE) ha cumplido con creces su objetivo, según YPFB, el cual era probar la existencia de un sistema petrolero eficiente en la cuenca del Subandino Norte.
Los estudios identificaron un recurso estimado en sitio de 1,7 trillones de pies cúbicos de gas natural. Actualmente se realiza la terminación del pozo Mayaya Centro X1, según reporte oficial.