LA PAZ
Título: 

Instalan muros perimetrales en pleno lecho de río aledaño al Valle de los Gigantes

AGENCIA DE NOTICIAS AMBIENTALES

Pese a las prohibiciones, tanto municipales como nacionales respecto a este tipo de construcciones, en uno de los afluentes del río Irpavi, precisamente en el sector del área protegida municipal serranías de Aruntaya, existen recientes edificaciones de muros perimetrales e inclusive pequeñas casas, y no, no se trata de muros de contención u obras hidráulicas.

En el lugar, área aledaña del Valle de los Gigantes, la expansión urbana se encuentra plenamente descontrolada, tanto así que las edificaciones afean hermosos atractivos naturales como las formaciones geológicas características de esos sitios, aunque evidentemente, tanto a nivel particular como municipal, se promueve la visita y recorrido por esos lugares cuyo acceso es considerado de dificultad media a difícil.

Otras normativas


Las casetas estaban vacías, todo en aires y lecho de río, uno de los afluentes del Río Irpavi, ello en la zona de Callapa-Aruntaya, aledaña al área protegida Valle de los Gigantes (Foto V. Ledezma ANA Bolivia)

Además de la prohibición citada en el epígrafe, el mismo reglamento, en su artículo 39 sobre propiedad aledaña a los lechos de río, se establece que: “Los propietarios de áreas que limiten con los cursos de los ríos están obligados a mantener libre de edificaciones la faja marginal y/o faja de uso, según corresponda, de acuerdo con los mapas temáticos elaborados por la DGIR” (Dirección General de Gestión Integral de Residuos Sólidos aclaración ANA).

Sin embargo, es preciso citar a la Constitución Política del Estado (CPE) que en su artículo 376 del capítulo quinto sobre recursos hídricos norma: “Los recursos hídricos de los ríos, lagos y lagunas que conforman las cuencas hidrográficas, por su potencialidad, por la variedad de recursos naturales que contienen y por ser parte fundamental de los ecosistemas, se consideran recursos estratégicos para el desarrollo y soberanía boliviana. El Estado evitará acciones en las nacientes y zonas intermedias de los ríos que ocasionen daños a los ecosistemas o disminuyan los caudales, preservará el estado natural y velará por el desarrollo y bienestar de la población”.


La abundancia de flora y fauna escala las formaciones geológicas (Foto V. Ledezma ANA Bolivia)

Cabe recordar que un lecho de río es definido como el terreno por donde corren sus aguas, “el cauce o lecho fluvial es la parte de un valle por donde discurren las aguas en su curso: es el confín físico normal de un flujo de agua, siendo sus confines laterales las riberas”…,“parte inferior de un valle fluvial, conformada por el flujo de agua…” (Wikipedia  

Además de colosales monumentos naturales, la biodiversidad, tanto en flora y fauna, es impresionante: aves como alkamaris, mamanis, más de una especie de colibríes como el picaflor gigante o el picaflor cometa, entre otros como lagartijas e insectos, justifican el carácter de área protegida del lugar, categorizada como área municipal de conservación ecológica y un excelente lugar para hacer estudios geológicos, por la variedad de rocas y formaciones.


Entre tanta majestuosidad natural se destaca, en el Valle de los Gigantes, un espacio destinado específicamente a la meditación (Foto V. Ledezma ANA Bolivia)

Sin embargo, el lugar, que integra el distrito municipal 22 de Hampaturi, sufre amenazas especificadas por la misma Guía de Áreas Protegidas Municipales, ésas son los avasallamientos, la apertura de caminos, movimientos ilegales de tierras con autorización de otros municipios, incendios y residuos sólidos.

Efectivamente, la mancha urbana que se extiende hasta determinados sectores del lugar, no deja de provocar desagrado entre los visitantes que deben pasar por ahí antes de ingresar al Valle de los Gigantes y los sitios que alberga, como espacios de meditación, panoramas únicos y lugares para observar aves.

Geositio


Douglas Ardiles brindó algunas declaraciones mientras se dirigía a acompañar un grupo de turistas locales que visitaban el sector (Foto V. Ledezma ANA Bolivia)

Al respecto fue posible entrevistar a Douglas Ardiles, responsable del proyecto del Valle de los Gigantes de la Comunidad Callapa-Aruntaya, aledaña al área protegida, quien informó además que dicha comunidad se encuentra en una superficie de 88 hectáreas (has) “evidentemente hay áreas o hay franjas que la alcaldía considera como área protegida dentro de las 88 has…”

Dentro de las 88 has, la comunidad ha decidido que el gran porcentaje va ser un área protegida, lo estamos denominando y estamos buscando la aprobación de una ley que es denominada como GEOSITIO, en realidad ustedes ven el Valle de los Gigantes tiene características geológicas bastante interesantes para mucho estudio, esto viene de la última glaciación y precisamente es un espacio que te brinda mucha historia, mucho tiempo, y es por eso que la comunidad ha decidido generar la protección necesaria a mucha áreas, que en realidad va ser más…”}


Impresionante, la cúspide de esta formación geológica presenta orificios gestados por la erosión y los años (Foto V. Ledezma ANA Bolivia)

Un geositio, investigando sobre ello, viene a ser un espacio geológico que es especialmente atractivo, “un lugar en el que puede apreciarse y comprenderse una parte de la historia geológica del territorio que estamos visitando… (Geoparque Villuercas)”.

Otra definición señala,” Un geositio, o lugar de interés geológico se define como una zona que se engloba dentro del patrimonio geológico de un lugar o región y que muestra una o varias características de importancia demostrada en la historia geológica de dicha región. En otras palabras, un geositio es una ventana al pasado, un lugar donde observar La Tierra desde un prisma nunca visto, y darnos cuenta de la increíble historia que el planeta ha desarrollado durante millones de años” (Geoparque Kütralkutra).


Como gigantes petrificados semejando enormes murallas (Foto V. Ledezma ANA Bolivia)

En cualquier caso, mientras el proyecto espera su aprobación, la ciudadanía tiene las puertas abiertas para visitar el lugar, tomando en cuenta las precauciones y consideraciones necesarias, como no dejar basura en el lugar ni destruir la flora al caminar, pues ya con la ley (Geositio) será posible establecer con precisión las áreas urbanas y las de protección.

Ascarrunz también destacó la importancia de estudiar a los recursos hídricos, “esto viene desde la parte de Hampaturi, son afluentes, en realidad también tenemos que hacer un estudio porque el componente hídrico tiene también otra peculiaridad acá, son vertientes que se activan con la lluvia y eso merece un estudio de cuenca y demás, es agua cien por cien natural”.

Tres componentes


Un maguey en floración (Foto V. Ledezma ANA Bolivia)

De la misma manera, el representante de Callapa-Aruntaya, detalló que en cuanto al proyecto se está trabajando en tres componentes: geológico, natural y cultural, enfatizando en que todo el sector, inclusive desde Pampahasi, que está mas arriba, fue un espacio de ritualidad en tiempos ancestrales, de las primeras poblaciones asentadas desde muchos años antes de Cristo, siendo así que existen vestigios precolombinos.

“Bueno, en realidad el Valle de los Gigantes, también otra característica, llamémosla así, entrando en lo intangible, tiene mucha fuerza el lugar, tiene mucha vitalidad y precisamente creemos que el espacio como tal nos ha permitido empezar a diseñar este proyecto, porque la idea es que nosotros partimos desde la lógica y la visión de la cosmovisión andina, en todo tiene que haber un equilibrio con la Pachamama, y nuestra obligación, obviamente, es protegerla porque ella también nos da vida, y evidentemente, sí, hay muchos apus y achachilas, vamos a trabajar en eso…puede haber duendes, puede haber energía en realidad…tiene un carácter positivo…vitalidad….”


Eso sí, el trayecto de ascenso por el Valle de los Gigantes requiere bastante esfuerzo, pero los panoramas del lugar son únicos (Foto V. Ledezma ANA Bolivia)