Buena Vista: reportan 4 casas y un auto quemados, gobierno dice que el incendio está controlado
ACTUALIZADO
Hasta el momento el resultado es trágico para cuatro familias. Perdieron sus casas, enseres y un vehículo totalmente calcinado por el incendio en los alrededores de la comunidad indígena de Buena Vista que enfrentó casi diez horas de infierno en el municipio de San Buenaventura, al norte del departamento de La Paz.
Desde las once de la mañana, los comunarios comenzaron a alertar que el incendio proveniente de los bosques se acercaba a la población. El Ministerio de Defensa mandó inicialmente 20 soldados de la Armada Boliviana y personal civil para coordinar; pero no fue suficiente porque el fuego salió de control.
La mayor parte de las casas quemadas fueron construidas a base de madera y techo de palma, y en el interior de sus canchones había almacenadas llantas, troncos y madera seca que utilizan para cocinar sus alimentos.
Los fuertes vientos y las condiciones de esas viviendas fueron el mejor combustible para que el incendio creciera sin poder ser controlado porque también faltó agua. La comunidad vive amenaza que el fuego se pueda expandir en cualquier momento.
Las cuadrillas de auxilio compuesto por soldados, bomberos voluntarios y personas solidarias no lograron el objetivo de levantar un cerco para evitar que el incendio llegue a la población civil, según reportaron medios locales a través de las redes sociales.
El personal de emergencias también vive afectado por falta de medios adecuados para enfrentar el incendio. Es más no hay agua en la comunidad, agregaron los comunicadores populares, mientras mostraban la circulación de una cisterna que distribuía agua para que la gente pueda consumir y también colaborar a controlar el incendio.
Vecinos del lugar indicaron que algunas familiares, como el propietario de un vehículo, perdieron todo por ir auxiliar a sus vecinos que vivían momentos de desesperación para salvar sus enseres, algunas prendas de vestir y alimentos.
Mientras muchas familiares sacaban sus electrodomésticos y algunas pertenencias de valor a la calle, civiles equipados con tanques de 10 litros de agua sobre sus espaldas trataban de armar un perímetro humedeciendo los árboles y las palmeras, cuyas hojas secas fueron el mejor medio para expandir el fuego.
Al inicio de la noche, brigadas médicas atendían con agua, colirio a los soldados y a la gente voluntaria que se ha movilizado desde las 11 de la mañana. El otro problema fue la falta de alimentación para soldados y las personas voluntarias.
El presidente de la CEPILAP, Gonzalo Oliver, describió la situación como “desastrosa y catastrófica” por la pérdida de cuatro casas hasta el momento. Indicó que el fuego salió de control por el viento, el clima y las altas temperaturas que han causado desesperación en la gente.
Explicó que la tarde del viernes ya dieron parte al Ministerio de Defensa que desplegó inicialmente un grupo de 20 soldados, luego reforzó con otros 20 y personal civil que tampoco fueron suficientes.
Lamentó que el helicóptero destinado a apagar el incendio haya una sufrido una avería técnica sin poder ser reparado de manera inmediata.
En declaraciones al portal “Informe Amazónico”, dijo que otras comunidades están siendo evacuadas porque el fuego se descontroló.
Entre tanto, decenas de niños y ancianos fueron puestos a buen recaudo en otras viviendas, mientras la gente continuaba alerta en las calles, cuidando sus pertenencias, pese a que la Policía Boliviana también se movilizó para ayudar en el orden y seguridad ciudadana.
Los pobladores hicieron un llamado a las instituciones del Estado para que atiendan de manera urgente a los sectores vulnerables y a la gente afectada por el incendio.
INCENDIO CONTROLADO
Entre tanto, el viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, informó que el incendio forestal fue encuentra controlado y está en proceso de sofocación. Para el gobierno solo se destruyeron dos viviendas, pero los comunarios reportaron cuatro casas quemadas.
En conferencia de prensa, la autoridad declaró: “En este momento la comunidad de indígenas de Bella Vista está completamente protegida, ya no hay peligro de que el fuego pueda ingresar, las personas han retornado a sus viviendas”.